Pese al ataque sufrido en el desfile en su honor, la reina Beatriz participará en celebración pública

Máxima, Guillermo y la reina Beatriz antes de la tragedia

La reina Beatriz de Holanda y otros miembros de la casa real participarán como estaba previsto en la ceremonia anual en recuerdo de los caídos en la Segunda Guerra Mundial, pese al ataque sufrido durante el desfile del Día de la Reina en Apeldoorn, a 90 kilómetros de Amsterdam.

La ceremonia en el centro de Amsterdam será la primera aparición pública de la reina desde el ataque, cuando un hombre de 38 años arremetió con su automóvil contra la multitud al paso de la familia real y lo estrelló contra un monumento. Su intención era empotrarse contra el autobús en el que viajaba la familia real, pero en lugar de eso mató a seis personas e hirió a doce.

El atacante, Karst T., confirmó a la policía antes de morir que su intención era atacar a la familia real.

Tras la celebración de mañana, el martes la reina y el príncipe heredero y su esposa, Máxima, participarán en La Haya en las festividades del día de la liberación de la ocupación alemana.

Todo tendrá lugar según se había previsto, informaron funcionarios, pese a los pequeños cambios realizados en algunas actividades para dotarlas de un carácter más solemne.

Además, las autoridades locales de la capital holandesa anunciaron medidas de seguridad extras los próximos días para proteger a la familia real.

Mientras, la televisión holandesa informó que las autoridades belgas están tomando también medidas adicionales para proteger a su familia real durante su próxima aparición pública en el desfile anual del 20 de julio, ya que temen que el incidente holandés dé la idea de que la realeza belga sería también un objetivo sencillo.

La reina Beatriz, el príncipe heredero y su esposa junto a la hermana de la reina, la princesa Margriet, y su esposo, Pieter van Vollenhoven, visitaron a las ocho personas que permanecen hospitalizadas tras sufrir heridas en el ataque del jueves.