12 de septiembre 2008 - 00:00

Se agrava violencia: doce muertos por enfrentamientos

Los gruposenfrentados: unjoven de laoposición conuna bombamolotov, ycampesinosoficialistasapedreando unvehículo quequiere entrar enSanta Cruz.
Los grupos enfrentados: un joven de la oposición con una bomba molotov, y campesinos oficialistas apedreando un vehículo que quiere entrar en Santa Cruz.
La Paz (EFE, AFP, Reuters, ANSA y DPA) - Al menos 12 muertos y decenas de heridos dejó ayer un enfrentamiento en Pando entre opositores al gobierno de Bolivia y campesinos que salieron en su defensa, en el tercer día de violentos saqueos a organismos estatales en las provincias opuestas al presidente Evo Morales.

El dirigente campesino Antonio Moreno explicó que el enfrentamiento se produjo en la población Tres Barrancas cuando «los compañeros que venían al ampliado campesino sufrieron la emboscada de funcionarios y trabajadores del Servicio Departamental de Caminos y la Prefectura de Pando».

Moreno aseguró que «los agresores tenían ametralladoras y fusiles». El gobierno y la representante presidencial en Pando responsabilizaron al prefecto (gobernador) Leopoldo Fernández por el ataque a los campesinos.

El viceministro de gobierno, Rubén Gamarra, había informado con anterioridad que los muertos en Pando eran sólo cuatro, uno de ellos Pedro Oshiro, funcionario de la Prefectura (gobernación), un concejal del municipio del Porvenir y dos campesinos.

Según el diario digital « Erbol», uno de esos dos campesinos fue «masacrado a palos» y el otro murió « arrollado por un vehículo de la Prefectura de Pando».

  • Identificaciones

    Por su parte la representante presidencial en Pando, Nancy Texeira, precisó en Cobija, citada por la Agencia Boliviana de Información (ABI), que de acuerdo con los primeros informes se había podido identificar entre los muertos, además, a Emilio Peña y Hernani Uzquiano.

    La crisis adquirió tal magnitud que el presidente Morales analizaba ayer la posibilidad de dictar el estado de sitio en las regiones de la llamada «media luna» (Santa Cruz, Tarija, Beni y Pando), según el embajador boliviano en Brasilia, René Dorfler. Esta alternativa había sido rechazada hasta ahora por el mandatario.

    «La Constitución establece esa posibilidad y el gobierno está evaluando el tema», dijo el diplomático en Brasilia, junto al ministro de Economía de Bolivia, Luis Arce.

    El líder indígena aseguró ayer en La Paz que «vamos a defender la democracia, el proceso de cambio y sobre todo vamos a garantizar la unidad del país». Morales reafirmó que las puertas del diálogo con la oposición «están abiertas», pero al mismo tiempo indicó que esos sectores impulsan tomas y saqueos de instituciones públicas y llaman a la división del país, lo que consideró una «abierta provocación».

    El presidente dijo que esos sectores de la oposición están esperando que el gobierno nacional tome medidas radicales «lo que no conseguirán».

  • Tregua

    Al cierre de esta edición el prefecto de Beni, Ernesto Suárez, y militares desplegados en esa región del nordeste de Bolivia pactaron una tregua tras los violentos enfrentamientos, mientras en otras cuatro regiones del país se mantenían los choques, informó la red «Erbol».

    Según el medio, el acuerdo establece que los militares dejarán de custodiar oficinas del Servicio de Impuestos Nacionales y del Servicio Nacional de Sanidad Agropecuaria, mientras los dirigentes civiles se comprometieron a no promover más tomas de entidades públicas.

    Los militares abandonaron sus posiciones, pero aclararon que retomarán las acciones si hay orden expresa del presidente. «Nosotros volvemos a nuestros cuarteles. Sólo saldremos a las calles si hay una orden escrita del presidente de la República», dijo un portavoz militar a la red de televisión «PAT».
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