El furor por las criptomonedas atrapa a miles, pero son millones los que caen cuando la promesa de riqueza se mezcla con la fama viral. La presión social y la aparición de figuras influyentes hacen de este mercado tan magnético como peligroso para el inversor común.
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Aprovechó su fama para lanzar una criptomoneda, pero la respuesta no fue la esperada
Millones apostaron por una de las criptomonedas más virales del año, pero el experimento terminó siendo una lección costosa y fugaz.
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Haliey Welch convirtió un meme viral en una criptomoneda que ilusionó a millones, pero su valor se desplomó en cuestión de horas.
Esa misma mezcla de fama viral y entusiasmo por los activos digitales explotó con un nombre que dio mucho que hablar: Haliey Welch, mejor conocida como "Hawk Tuah Girl". Lo que comenzó como una broma se convirtió en una pesadilla financiera para muchos.
Quién es Haliey Welch y cómo llegó a ser una criptomoneda
Haliey Welch, de Tennessee, saltó a la fama en TikTok tras lanzar una frase provocadora durante una entrevista callejera. Su expresión se volvió viral y dio paso a memes, remixes, productos y, finalmente, a la creación de una memecoin con su nombre: Hawk Tuah.
Animada por su repentino alcance global, Welch decidió capitalizar esa atención. Con un lanzamiento lleno de promesas y sin un plan sólido, presentó la moneda como un proyecto "comunitario". El furor inicial disparó su valor, alcanzando los 500 millones de dólares en capitalización.
Sin embargo, tras esa subida meteórica, llegó la debacle. En cuestión de horas, el valor de Hawk Tuah cayó a 25 millones. La falta de transparencia, errores técnicos y una estructura deficiente derrumbaron el entusiasmo.
Las críticas no tardaron. Welch fue acusada de fomentar un esquema tipo pump and dump, donde se infla el precio para vender antes del desplome. Aunque ella negó esa intención y culpó a especuladores externos, la dañina percepción ya estaba instalada.
La caída del Hawk Tuah
El desastre de Hawk Tuah no solo vació los bolsillos de quienes creyeron en la propuesta. También evidenció el riesgo de proyectos cripto impulsados por celebridades sin conocimientos del sector.
Al no contar con auditorías independientes ni una hoja de ruta técnica, la iniciativa dejó expuestas vulnerabilidades graves. El proyecto no cumplió con estándares de seguridad, lo que generó desconfianza y aceleró su desplome.
Este episodio se suma a una larga lista de fracasos en el universo de las memecoins, pero deja una lección contundente: la fama puede atraer inversión, pero no reemplaza la necesidad de bases sólidas ni de una comunidad informada. Para muchos, Haliey Welch debería volver a los videos cortos y mantenerse lejos del mundo cripto.
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