Max Higgins se hacía llamar el Rey del Entretenimiento y prometía invertir millones de dólares en Argentina. El empresario jamaiquino aseguraba que iba a inaugurar un parque de Disney en el país y también realizó un reality show junto a Diego Maradona. La vida del multimillonario dio un inesperado giro y pasó de los lujos a vivir en la calle.
Era millonario, iba a construir un parque de Disney en Argentina y terminó indigente e internado en una internación psiquiátrica
El empresario jamaiquino buscó invertir más de mil millones de dólares para realizar un parque de diversiones de la firma estadounidense en el país.
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El extranjero formó un programa de televisión titulado World Football Idol junto al astro argentino para encontrar a una futura estrella local. Este proyecto tuvo tres temporadas, contó con participación de Sergio Goycochea y Gabriel Batistuta. Además de que contrató a diversos músicos para sus episodios, entre ellos se destacaron Los Nocheros, Miranda, Soledad Pastorutti, Gloria Gaynor y Durán Durán.
El proyecto de Higgins nunca triunfó en la televisión y las gradas de sus presentaciones destacaban por la gran ausencia de público. Todo ello a pesar de que el jamaiquino aseguraba que los premios para el ganador sería un Lamborghini Diablo, 100 dólares y una prueba en un equipo del mundo que el empresario decidiera.
El sueño del "Disney argentino": la estafa detrás del ambicioso proyecto
El empresario, que tenía una cotidianidad entre autos de lujo y hoteles de cinco estrellas, había anunciado en 2007 que fundaría un complejo de Disneyworld en San Pedro. Higgins detallaba que invertiría más de mil millones de dólares en el complejo. Varios inversionistas creyeron en su palabra y en las precarias presentaciones a pesar de que Disney había hecho públicas sus advertencias sobre el uso de su marca. Posteriormente, se conoció que ningún inversionista recibió algún dinero de regreso.
Max Higgins: de la fama efímera a la internación en el Hospital Borda
La verdadera identidad del jamaiquino se conoció tras la separación con su ex esposa argentina, Sandra Zapata. Ella detalló que de un momento a otro pasaron de vivir en una pensión en San Telmo a un piso en Puerto Madero. Este cambió también se dio en su transporte, ya que pasaron de viajar en subte a andar en autos de lujos y aviones privados.
Zapata demostró que Higgins había sido declarado culpable en Estados Unidos y en Inglaterra por estafas con cheques sin fondo y fabulación. El jamaiquino hasta había estado tras las rejas en el país norteamericano y tuvo su misma forma de ganarse la vida en Argentina. Esto también pasó en su programa televisivo, donde el auto de su premio era prestado y que anunciaba patrocinadores que nunca se habían acercado a su producción.
Se sospecha que todo su dinero provenía de un “esquema Ponzi”, una operación piramidal donde las ganancias se generan a través de nuevos inversores y no de generar un capital real.
Su vida en la calle le hizo entrar en un estado mental deplorable, del cual no se acordaba quién era y qué había hecho. Las autoridades sostienen que su cuadro podría generar cierto riesgo tanto para él mismo como para la sociedad. Los especialistas lo diagnosticaron de descomposición psicótica y lo trasladaron al Hospital Borda. Se conoció que: “Su internación fue involuntaria. Pese a no oponer resistencia, y a no entender lo que pasaba, Higgins fue llevado esposado”.
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