8 de febrero 2024 - 00:00

Habrá que esperar a julio para que ingresen los dólares del campo: ¿Por qué?

Para comprender la situación actual de la campaña agrícola hay que analizar tres pilares: el clima, los precios internacionales y la dinámica para la comercialización de los cultivos.

Hay expectativa por los stock finales de las cosechas de granos.

Hay expectativa por los stock finales de las cosechas de granos.

Mientras todas las miradas están puestas en el derrotero de la ley ómnibus y en la ola de calor, lo importante para el sector agropecuario pasa por lo que ocurrirá con las lluvias y con el precio de los granos.

Este jueves el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA) dará a conocer su informe mensual con estimaciones agrícolas sobre oferta y demanda de granos en el nivel mundial. Si bien la principal atracción del documento estará puesta en las modificaciones que el organismo pueda hacer sobre los volúmenes de las cosechas de granos gruesos en Brasil y en la Argentina, también habrá que observar cuáles serán las existencias finales en el propio país del norte.

Ya sea por el factor climático -la sequía pegó fuerte en Brasil y una poco esperada ola de calor castigó nuestra región- o por los stocks finales que tienen una relación directa en los precios que ofrece Chicago, el informe pondrá un poco más de claridad en un contexto en el que reina el pesimismo cuando en realidad deberían primar la paciencia y la tranquilidad.

Enrique Erize, titular de la Consultora Novitas, aseguró a Ámbito que “si bien se habla mucho de esta ola de calor, cuando uno mira el perfil del suelo no esta tan mal. Hay lugares de la zona núcleo complicados pero en general se venía muy bien. En algunas regiones dicen que se puede estar perdiendo un millón de toneladas por día, pero por ahora son sólo versiones”.

Según el analista del mercado de granos, “seguimos con una propuesta de cosecha muy buena de parte de Argentina aunque compleja en materia de precios".

Tres factores para entender la campaña agrícola

Para comprender cuál es la real situación de la campaña agrícola hay que analizar tres pilares: el primero de ellos es la cuestión climática, el segundo es el tema precios internacionales y el último punto es la dinámica que se tenga para la comercialización de los cultivos.

El primero de los tres puntos, es decir el climático, es el factor más impredecible de todos. Sin embargo, la buena noticia es que a partir de las próximas horas se podrían hacer realidad los pronósticos de lluvias en gran parte de la zona centro, con lo cual llegaría el alivio ante una ola de calor que complicó una buena parte de la zona agrícola con soja y maíz.

La segunda cuestión es muy importante, porque si bien al día de hoy los precios son muy bajos en comparación con los de algunos meses atrás, es probable que -con paciencia- puedan moverse al alza.

En este sentido, Erize precisó que “la cosecha americana de soja fue buena, no fue récord, pero fue buena. La cosecha de Brasil, más allá de todo lo que se está diciendo, es buena. No va a ser un cosechón como se pensaba, pero va a ser superior a la del año pasado, que fue récord. Y en Argentina probablemente nos ubiquemos por encima de los 45 millones, muy superior a la del año pasado. Así que desde el punto de vista de la oferta, la demanda puede estar bastante tranquila y esto lo saben los Chinos, que son muy inteligentes operando porque saben que los stocks mundiales de soja son altos”.

Soja en el mundo y precios

Un punto a considerar muy interesante radica en que lo que se está viviendo, ya ocurrió hace algunos años. Con este nivel de reservas de soja hay que saber que en el gobierno de Macri la soja en Chicago valía 320 dólares. Hoy está en 440 dólares, es decir unos 120 dólares por arriba con el mismo nivel de stocks. La pregunta es entonces: ¿Por qué hoy no se está más abajo?

Erize lo explica y argumenta que “los stocks americanos son bajos y eso nos va a salvar de un desastre en materia de precios. Hay que tener paciencia y comprender que los momentos del mercado van mutando. Mucha gente mira su barrio y se hace toda una historia; Pero eso es peligroso, porque soja en el mundo hay, entonces esta baja de precios es justificada. Quizá para julio, cuando estemos en plena comercialización de nuestra cosecha, los stocks en Estados Unidos lleguen a los mínimos previstos y Chicago va a estar nervioso. Esa es la última esperanza que nos queda”.

Los dólares llegarían recién a partir de julio

Aquí es cuando entra en escena el tercer aspecto: la comercialización. Muchos hablan de la necesidad del Gobierno de “aguantar” hasta llegar a abril o mayo para lograr empalmar con el ingreso de dólares de la cosecha, pero la realidad es que habrá que esperar un poco mas si se quiere capturar precio y sin dudas eso es lo que el productor va a ir a buscar. Esto puede ocurrir recién a partir de julio.

Esta es la foto del sector al día de hoy y si bien todo puede cambiar, el futuro es promisorio: hay que tener paciencia, manejar los tiempos del mercado y esperar, porque para mitad de año el mercado va a dar buenas señales. Además, los fondos de inversión están vendidos en niveles récord, con lo cual eso también está jugando en contra.

Al ser consultado Erize sobre una posible devaluación a partir de marzo, el analista aseguró que “en el campo mucha gente esta especulando con un ajuste cambiario y si la tasa de devaluación supera el 25 %, va a ser inevitable. Eso sería un nuevo problema para el gobierno ya que devaluar implicaría un nuevo salto inflacionario que complejizaría toda la situación económica”.

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