30 de octubre 2020 - 00:00

Senado blinda Presupuesto 2021 con perdón de ANSES a provincias

La iniciativa, ya aprobada por Diputados, modifica el flujo de fondos relacionados con la Reparación Histórica y el Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS). Alivio a distritos con bono a mediano-largo plazo.

A FONDO. Cristina de Kirchner confundió a propios y extraños ayer durante una votación

A FONDO. Cristina de Kirchner confundió a propios y extraños ayer durante una votación

Ignacio Petunchi

El Senado sancionará, durante la tarde de hoy, una iniciativa fundamental para los votos que en parte logró el Presupuesto 2021 en Diputados: el de “Defensa de los Activos del Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS) del Sistema Integrado Previsional Argentino”.

La iniciativa, que ya cuenta con el aval de la Cámara baja, activa una especie de perdón a provincias -ya arreglado entre Casa Rosada y gobernadores- por deudas con el organismo, pero además involucra modificaciones de flujos y asistencias de la Administración Central y el Tesoro para cumplir con los vencimientos de la Reparación Histórica, tras el agotamiento de recursos generados por el último blanqueo. Por eso es que se pretende evitar la venta de activos del FGS.

El texto también instruye al Ejecutivo para que la ANSES negocie un mutuo “en un plazo 90 días” con las provincias, siempre y cuando éstas quieran. También se permitirá reconvertir dicho acuerdo en un bono con vencimiento a “mediano plazo” -se mencionaron de cuatro a siete años, pero la decisión quedará en manos del Ejecutivo- bajo los siguientes parámetros: “montos del acuerdo”; “plazo” de ocho meses a contar desde la suscripción del acuerdo -es decir, luego de firmar el mutuo-, aunque el Ejecutivo podrá ampliar el plazo; “amortización”; e “intereses”, con tasa Badlar -Bancos Privados- aplicable para depósitos a plazo fijo de más de un millón de pesos de 30 a 35 días.

Recinto por dos

La Cámara alta sesionó también ayer y sancionó la ley que declara de interés público la investigación, desarrollo, fabricación y adquisición de las vacunas contra el nuevo coronavirus, para facilitar los convenios a realizar y permitir la jurisdicción de tribunales extranjeros, cláusulas exigidas en algunos casos por los laboratorios. Hubo algunas objeciones desde Juntos por el Cambio.

Anoche, al cierre de esta edición, el pleno del Senado debatía un proyecto de ley sobre etiquetado de alimentos, que establece la colocación de una serie de sellos frontales en los envases de alimentos con altos contenidos de sodio, azúcares, grasas saturadas, grasas totales y calorías. Legisladores del oficialismo y la oposición que representan a Tucumán anunciaron días atrás su rechazo, debido a que consideran que choca con la industria azucarera de su provincia.

Durante el encuentro de ayer, la Cámara alta también aprobó el pliego de Roberto Carlés -frustrado candidato a juez de la Corte en la última etapa del cristinismo- como embajador en Italia. Además, el kirchnerismo evitó el retiro de proyectos opositores de Martín Lousteau y Lucila Crexell que proponen modificaciones en el Ministerio Público Fiscal.

El objetivo del Frente de Todos, a través del titular de la comisión de Justicia, Oscar Parrilli, es utilizar esas iniciativas como base para empujar la modificación de la mayoría necesaria para votar al procurador general -jefe de fiscales-, que en la actualidad es dos tercios.

La bancada oficialista no cuenta con ese número para imponer a su postulante, Daniel Rafecas, y busca por vías paralelas limar al procurador interino, Eduardo Casal. El no retiro de los proyectos casi genera un escándalo ayer en el recinto, por una votación desordenada que impuso Cristina de Kirchner -por fuera de toda lógica- y que confundió a casi todos los legisladores que participaban de la sesión.

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