Lanzaron el Programa Nacional Integral de Inteligencia Artificial en la Justicia

El Sistema Argentino de Información Jurídica (SAIJ) lanzó el Programa Nacional Integral de Inteligencia Artificial en la Justicia. La ejecución está a cargo del Instituto Federal de Innovación, Tecnología y Justicia y el Laboratorio de IA de la UBA. Participan más de 2.000 personas.

fallo justicia.jpg
Depositphotos

El miércoles a la mañana se realizó el primer encuentro del Programa Piloto de Uso Estratégico y Responsable de Inteligencia Artificial Generativa en la Justicia Argentina en el que Mario Adaro, Director del Instituto Federal de Innovación, Tecnología y Justicia (IFITeJ) y Juan Corvalán, Director del Laboratorio de Innovación e Inteligencia Artificial de la UBA (IALAB), explicaron a más de 2 mil empleados judiciales de todo el país cuál es el plan en materia de Justicia e Inteligencia Artificial Generativa (IA Gen).

El Director Nacional del SAIJ, Fernando Horowitz, respaldó la labor del equipo que se reunió en la sede de Retiro de la Junta Federal de Cortes y Superiores Tribunales de Justicia, organismo que nuclea las instituciones judiciales provinciales.

En conversación exclusiva con Ámbito, Mario Adaro y Juan Corvalán analizaron diferentes aspectos de la disrupción de la IA Gen en la Justicia.

Periodista: ¿Cómo nace la idea de avanzar en este Programa?

Juan Corvalán (JC): Nosotros venimos realizando pruebas piloto en diferentes provincias y fueros, y entendemos que hoy día la IA Gen agiliza muchísimo tareas en la abogacía en general, y especialmente en la Justicia, desde revisar y comparar normativa hasta redactar textos. Y el margen de error es verdaderamente bajo siempre que se utilicen los prompts -consignas- adecuados.

-N de R: Vale agregar que el equipo del IALAB revisó, recientemente, el uso de grandes modelos de lenguaje -LLM, por su sigla en inglés, en referencia a algoritmos de Procesamiento del Lenguaje Natural, PLN- en el derecho, y encontró que, con las consignas adecuadas se optimiza el tiempo de trabajo en un 86 por ciento. Los resultados completos de la investigación fueron publicados en marzo de este año con el nombre Implementando Inteligencia Artificial Generativa en Estudios Jurídicos y Departamentos Legales, por Thomson Reuters.

el equipo entero IA Justicia.jpg

En ese sentido, y ante los riesgos que se corren en oficinas judiciales con el uso de software propietario y sobre el que las instituciones argentinas no tienen control, Adaro aporta: “entendemos que, desde cierta perspectiva y a primera vista, lo óptimo sería programar una herramienta específica para la Justicia argentina, que permitiera mayor control y adecuación de los LLM. Pero la realidad de América Latina no es esa, y entendemos que hoy día estamos usando cada vez más ChatGPT, Copilot, y otros. Entonces nos parece lo mejor implementar un Programa con el que relevamos el uso de los asistentes virtuales en todo el país, y enseñamos a usar estos programas en forma responsable y apuntando a la eficiencia”.

Uno de los aspectos destacables del Programa es que reúne fases de experimentación y enseñanza de buenas prácticas (a la vanguardia respecto de lo que ocurre, por lo menos, en América Latina) sin perder espíritu crítico acerca de los errores y sesgos que estos LLM pueden tener.

P.: En la medida en que sabemos que los asistentes virtuales aprenden y sus respuestas van cambiando, ¿cómo estamos seguros de que lo que en estos cuatro meses se plantea, sirve para dentro de un año, por ejemplo?

Mario Adaro (MA): Justamente porque no lo sabemos, uno de los resultados de este programa es la creación de una comunidad con la que vamos a estar dando seguimiento a la evolución del uso de los LLM en las Justicias provinciales y juzgados federales argentinos.

JC: Hay una realidad que conocemos muy bien porque somos quienes venimos desarrollando e incorporando tecnología en la Justicia para varios países de América Latina. La región, y nuestro país, son muy desiguales. En ese sentido, hay lugares donde se hace lo que se puede, y nosotros pretendemos bajar el margen de error sin desconocer lo que ya ocurre. De todas formas, cada jurisdicción es autónoma en cuanto a cómo implementar el uso de estos instrumentos, y lo hace bajo su responsabilidad.

Horowitz y Corvalán.jpg

Al acceder en exclusiva a documentos que fueron provistos a los participantes del Programa Piloto en cuestión, es muy llamativo cómo se indica el uso verdaderamente inteligente y calificado del software, por ejemplo, aclarando que se pretende una respuesta basada en una fuente específica y ninguna otra. Sería algo como que un empleado judicial escriba en ChatGPT4 “soy un abogado trabajando en la Fiscalía (…) y necesito que respondas la demanda que te copio debajo, basándote en el capítulo 1 del Código Civil y Contravencional de (…)”.

La precisión en las consignas surge de un trabajo de investigación que el IALAB viene realizando hace algo más de dos años, y se profundizó luego del lanzamiento de ChatGPT 4, en marzo del año pasado.

Al respecto, Corvalán recomienda “tener registro de los prompts que van demostrando mejor performance, porque eso permite ahorrar tiempo y aprender del modelo que estemos usando”.

Uno de los participantes del evento inaugural fue Enzo María Le Fevre Cervini, miembro del IALAB y experto en IA para el sector público quien lleva 4 años trabajando en la Comisión Europea como responsable de la implementación ética de la tecnología por parte de los Estados miembro del Viejo Continente.

El mismo Le Fevre Cervini señaló, en la apertura de este ciclo, que “en Europa no hay un programa de estas características”.

Sobre el punto, Adaro sostiene “la cantidad de participantes voluntarios que no sólo aprenden colaborativamente sino que, además, nos permiten relevar este fenómeno y mejorar el uso de la IA generativa en la Justicia, es lo que hace que esta iniciativa sea única”.

P.: ¿Qué es lo que esperan obtener al final del Programa?

MA: Una de las cosas que esperamos es que, clasificando la información que provean los voluntarios, vamos a poder saber bien específicamente qué prompt, en qué modelo, brinda mejores resultados según el fuero. Es decir ‘este sistema rinde mejor si se usa en causas civiles de primera instancia para responder tal cuestión’.

Si bien estamos entrenando redes neuronales con un grupo de experimentación y datos propios, lo cierto es que hoy lo más práctico y horizontal es que intentemos ajustar lo mejor posible el uso que en cada jurisdicción se hace de los asistentes virtuales.

Sostener este trabajo que estamos iniciando, generando redes de innovación dentro del Poder Judicial, es clave, porque como todos los LLM trabajan sobre probabilística, cuanto mejor los usemos según criterios comunes y consensuados, mejores resultados obtendremos.

Pero atención, porque al mismo tiempo esa comunidad en red nos tiene que servir para compartir alertas del estilo ‘cuidado con usar tal modelo en tal fuero para esto o aquello porque alucina’.

JC: Claro, y tenemos que entender que la supervisión humana es primordial. Estos sistemas no piensan igual que una persona y simulan comprender probabilísticamente el Derecho. No tienen emociones y tampoco experimentan el mundo ni conocen profundamente el contexto de nuestra realidad. Por eso siempre hay que revisar la información que nos brindan, chequear los datos, e incluso probar varias consignas diferentes para la misma respuesta.

La Fevre.jpg

Según lo que plantea el plan de acción, en octubre conoceremos los resultados de este Programa Piloto. Al mismo tiempo, para ese entonces más de 2 mil empleados judiciales de todo el país habrán accedido a una formación de vanguardia, por parte de referentes de la innovación tecnológica en la Justicia, cuyo trabajo impacta en la región desde hace años.

En esta materia, el dilema argentino es bien conocido: tenemos, por un lado, talento humano y coraje para ir a la vanguardia, pero, por otro, asimetrías profundas y una coyuntura que, como es habitual, condiciona mucho.

Es como si fueran las dos manos con las que el país intenta asir su propio futuro; o los brazos con los que pretende contenernos.

Dejá tu comentario

Te puede interesar