Gimnasios apelan a la salud para el regreso de la actividad

Lejos de los titulares quedó la reactivación parcial de una serie de gimnasios del Conurbano que reabrieron bajo la modalidad de la prescripción médica. El método empleado, con los protocolos del caso, no responde solo a casos aislados sino también toma forma de prueba para lograr la reapertura general.

Alivio. La actividad en gimnasios se reabrió parcialmente en PBA.

El regreso a la actividad física fue una de las postales más celebradas ayer por los bonaerenses en las redes sociales. Luego de cinco meses, la Provincia levantó la bandera para la realización de 17 prácticas deportivas entre ellas el tenis, el pádel y el atletismo.

Pero no fueron las únicas. Lejos de los titulares quedó la reactivación parcial de una serie de gimnasios del Conurbano que reabrieron bajo la modalidad de la prescripción médica, ya sea por rehabilitación física o psíquica. Así sucedió en algunos complejos de Tres de Febrero, Ezeiza, San Miguel, José C. Paz, Merlo e Ituzaingó, según reportaron desde la Cámara Argentina de Gimnasios (CGA).

Se trata de gente que tenía un tratamiento y que por la pandemia debió cortarlo, pero que a partir de esta semana pudo retomar su proceso médico.

Pero el método empleado, con los protocolos del caso, no responde solo a casos aislados sino también toma forma de prueba para lograr la reapertura general. Y es que la situación de los gimnasios en complicada. De los 8 mil locales que había en el país se calcula que hubo un cierre de entre el 10% y el 12% por lo que en la actualidad son 7 mil los que se mantienen en pie. De esa cantidad, 3 mil se encuentran en PBA. Y de esos, hay 300 que ya bajaron la persiana.

Desde la CGA apelan a la salud como principal motor para el regreso de la actividad. “Pudimos demostrar mediante estudios que el gimnasio no es un lugar de transmisión. Somos una de las actividades más fáciles de acatar desde los protocolos porque la gente se pone a disposición, obedece normas y tiene quien las vigile”, asegura, en diálogo con Ámbito, Adrián Stoll, vicepresidente de CGA.

Según Stoll las autoridades fueron entendiendo que es una actividad que “es necesaria, que eleva nuestras defensas. De a poco, compartiendo conocimientos, vamos logrando avances”.

Luego de cinco meses sin abrir la situación económica de los complejos es difícil. Y hoy la experiencia de quienes pudieron abrir en el interior de la Provincia expone que ni siquiera logran igualar con los costos de la apertura. “No salimos ni empatados. Volvemos con un 4 a 1 de visitante, sabiendo que hicimos un gol. Pero es solo un paso. ¿Si es para celebrar? Más o menos. Festejamos con agua”, sostiene Stoll.

Pese a que durante algunos meses, las grandes cadenas de gimnasios pudieron sostenerse con los pagos anuales, luego del tercer mes las bajas se acrecentaron y hoy sólo el 20% mantiene la membresía. Mucho peor aquellos que sólo cobraban por mes. “Hoy hay que pensar en aquel que siguió pagando como un cliente fundador”, cierra Stoll.