Para él no hay rivales difíciles. Roger Federer sigue inalterable su camino rumbo a un nuevo título en el Abierto de Australia. Su última víctima fue el español Tommy Robredo al que derrotó en sets corridos por 6-3, 7-6 (7-2) y 7-5, lo que lo llevó a semifinales donde tendrá como rival al norteamericano Andy Roddick, que derrotó a su compatriota y amigo desde que compartieron la escuela secundaria Mardy Fish por un contundente 6-2, 6-2 y 6-2. Federer, que va por su décimo título de grand slam, lleva una racha ganadora de 33 partidos consecutivos y se quejó del piso, pero alabó a su rival: «Las condiciones eran muy lentas y estaba ventoso, así que tuve adaptarme a eso. Tommy Robredo es un duro jugador de base, por lo que actúa con inteligencia. Traté de cambiar un poco las cosas, pero se me hizo difícil encontrar mi ritmo».
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Los otros dos semifinalistas saldrán de los duelos que se están jugando al cierre de esta edición entre el español Rafael Nadal y el chileno Fernando González por un lado, y el alemán Nikolai Davydenko y el alemán Tommy Haas por otro.
En el cuadro femenino también hay confirmada una semifinal: la que jugarán la norteamericana Serena Williams y la checa Nicole Vaidisova. Williams derrotó a la israelí Shahar Peer por 3-6, 6-2 y 8-6, mientras que Vaidisova le ganó a su compatriota Lucie Safarova por 6-1 y 6-4.
Al cierre de esta edición, jugaban la principal favorita, la rusa María Sharapova, ante la también rusa Anna Chakvetdaze, y la belga Kim Clijsters ante la suiza Martina Hingis. Las dos ganadoras jugarán entre ellas la otra semifinal.
Por otro lado, David Nalbandian declaró que ve difícil su participación en la primera ronda de la Copa Davis ante Austria entre el 9 y 11 de febrero en Viena. «Veremos cómo me recupero en estas dos semanas, pero lo veo difícil», declaró.
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