El presidente de Boca, Daniel Angelici, denunció que recibió amenazas de los barras de su club, así como también su familia, y reclamó que " el Estado sabe quién tiene antecedentes", al tiempo que confesó que los dirigentes del fútbol argentino ya no toleran la situación.
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"Recibí amenazas de los barras más allá de las pintadas. Me llamaron por teléfono a mí, en mi casa, llamaron a mis hijos. No puedo poner en riesgo mis cosas", acusó Angelici.
A su vez, el titular "xeneize" demandó que la parte política tome cartas en el asunto: "El Estado sabe quién tiene antecedentes, quién es violento y quién no. Y tiene las herramientas para frenarlos".
"También debemos saber cuándo es delito ser barra, si adentro o fuera de la cancha", amplió el dirigente en diálogo con varios medios, luego de la presentación del delantero Daniel Osvaldo.
Tras ratificar que "Boca no le dio entradas a nadie", Angelici disparó: "Los dirigentes estamos encerrados, y los presidentes nos estamos cansando de esta situación".
El club de la Ribera está siendo investigado por el juez Manuel de Campos por la presunta vinculación de la barra con el departamento de socios de la entidad. Además, el exjefe de la hincha, Mauro Martín, está acusado de participar en el homicidio de un vecino del barrio de Liniers, causa original de la cual se desprendió la anterior.
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