19 de septiembre 2010 - 09:47

Por Palermo, Boca le ganó a Colón y sueña

Boca superó a Colón de Santa Fe por 3 a 1 en La Bombonera, en el partido que completó la séptima fecha del Torneo Apertura de fútbol y quedó en una posición expectante, a cinco puntos del líder, San Lorenzo de Almagro.

Iván Moreno y Fabianesi abrió el marcador cuando iban 42 minutos y sorprendía Colón, pero Martín Palermo igualó en el adicionado y llevó tranquilidad a un vestuario que prometía estar desesperado.

En la segunda parte, el mismo Palermo aumentó a los 4 y a los 39, aunque antes de su tercer tanto desvió un penal por sobre el travesaño.

Colón, por su parte, se quedó con diez hombres a los 29 minutos del segundo tiempo por la expulsión de Juan Quiroga.

Con un protagonismo absoluto del máximo goleador de la historia de Boca con 227 tantos, el local quedó ahora en una posición mucho más aceptable para sus aspiraciones.

En un partido parejo en escasez de ideas y movimientos previsibles durante buena parte del primer tiempo, ambos equipos al menos mantuvieron el orden y Boca sorprendió por primera vez cuando Clemente Rodríguez fue a buscar una excelente habilitación en profundidad que le llegó desde la mitad de cancha y definió apenas desviado.

Cuando se jugaban 28 minutos, Boca volvió a aproximarse con riesgo y esta vez se lo perdió Palermo que cabeceó en un córner, pero fue mérito del arquero Diego Pozo, quien salvó su valla.

Colón, que no había sorprendido y no había tenido puntería hasta ese momento, sorprendió a Boca cuando Gary Medel intentó cerrar hacia adentro, perdió la pelota con Moreno y Fabianesi, quien no dudó y remató rápidamente cruzado, abriendo el marcador.

Se podía hablar de "injusticia" pero había mérito en haber sabido aprovechar un error del rival y el premio era el gol. El conjunto visitante pudo aumentar el marcador pero Boca reaccionó y en tiempo adicionado apareció Palermo con una exquisita definición. Tras una habilitación de Matías Caruzzo, el goleador quedó mano a mano con Pozo y no dudó en picarle la pelota cuando éste se arrodilló, para igualar las acciones.

Boca disfrutó del mejor Palermo porque a los 5 minutos del complemento, bajó con el pecho dentro del área un cambio de frente de Clemente Rodríguez y definió de primera con la pierna menos hábil, la derecha.

Con el 2-1, frente a un equipo lleno de limitaciones -apenas con algo de voluntad- y un gran desorden, Boca comenzó a marcar superioridad y en una escapada a fondo de Lucas Viatri, el arquero lo derribó ganándose la amonestación.

El arquero suplente de Colón, Marcos Díaz, -que había reemplazado al lesionado Pozo- fue a hablar a Palermo antes de la ejecución, el delantero disparó alto y desviado.

Pero esas también son cosas de este goleador tan particular que pronto tuvo otra ocasión y también falló. Sin embargo a los 39 aumentó la cuenta de su equipo y liquidó el partido, en la definición de una jugada excelente.

Boca ganó un partido en el que tenía que conseguir los tres puntos para no perder el tren ya que los tres punteros con los que empezó la fecha (Estudiantes, Vélez y River), no habían podido ganar y debía achicar las diferencias para seguir con chances de campeonar en el Apertura.

Para eso apeló a una vieja, conocida e infalible fórmula: la del goleador histórico del club. Palermo, como ante Olimpo, volvió a ser la figura del equipo y se convirtió, junto a David Ramírez de Godoy Cruz, en el goleador del torneo Apertura con 5 conquistas.

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