Victor Troicki se descontroló. No sólo porque perdió su partido ante Ernest Gulbis por un doble 6-1, sino por los fallos del umpire Cedric Mourier, a quien tuvo cuatro minutos bajo sus constantes protestas por un discutido fallo.
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Cuando al serbio se le fue larga una pelota, le pidió al árbitro que revisara el fallo. Cuando éste reafirmó su decisión Troicki cruzó la red y lo increpó. "Vos sabés que está mal, sabés que está mal", le gritaba mientras señalaba el pique.
Al principio las protestas fueron tomadas con algo de humor, pero después se tornaron un tanto pesadas y elevadas de tono. "No hay espacio entre la pelota y la línea de fondo", continuó Troicki. "¡Se ve desde el espacio!", retrucó mientras el público se reía.
Envalentonado por su minuto de gloria, el serbio amenazó: "Me voy a retirar del partido". Y le puso la frutilla del postre a su actuación cómica cuando tomó a un camarógrafo y lo obligó a enfocar de cerca el pique en el polvo de ladrillo de Roma. "Dame la cámara. Por favor. Dame la cámara. La agarro", finalizó Troicki, y se acercó a línea de fondo.
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