23 de febrero 2004 - 00:00

Empresas golpeadas después del default

Ver recuadro: Ultimas empresas en renegociar bonos

En los últimos cuatro meses las empresas privadas reestructuraron «2.618 millones de dólares», pero el resultado final de este proceso dependería de una serie de variables a resolverse en el futuro, según revela el informe semanal de Fundación Capital.

«En el último trimestre de 2003 hubo 7 reestructuraciones por u$s 2.148 millones, mientras que en enero y lo que va de febrero se concretaron 2 más por u$s 470 millones.»

Por su parte, el informe agrega que «un análisis de la situación presente del mercado corporativo en cuanto a default y renegociación de la deuda privada, da como resultado que de una muestra de 91 empresas, 11 de ellas estuvieron involucradas en 15 eventos de default, como ser cesación de pagos de capital y/o intereses o incumpliendo alguna condición original de los títulos por un monto que totalizó unos u$s 474 millones durante el último trimestre del año 2003, y durante enero y febrero de este año 7 empresas también registraron 7 incumplimientos por un monto que ascendió a unos u$s 22 millones».

•Optimismo

Según la consultora, la metodología utilizada en la mayoría de las renegociaciones es la de Acuerdo Preventivo Extrajudicial (APE), por la cual al obtenerse la aprobación de la «mayoría de los bonistas (51%), luego de la homologación judicial, sus condiciones se extienden a la totalidad de los acreedores». Bajo este método se renegociaron 80% de los u$s 2.618 millones (u$s 2.104 millones).

El trabajo es optimista en cuanto al futuro de las reestructuraciones y afirma que
«se espera que durante el presente año continúen aumentando, no sólo en cantidad sino también en monto».

Sin embargo, Fundación Capital expresa que, pese a que las reestructuraciones concretadas son una salida a la situación de mora, no son una solución definitiva, «sino una postergación en el tiempo de la falta de capacidad de pago actual de las empresas».


Es por esto que para lograr algo permanente debe concretarse una serie de factores. El primero es la finalización de la «reestructuración de deuda pública». Además es imprescindible resolver el tema de las tarifas de servicios públicos, que «no sólo impactarán y determinarán las renegociaciones de la deuda de tales sectores, sino que además influirán sobre otras empresas donde estos insumos (costo y previsión) tengan una incidencia importante». En tanto, «las compensaciones bancarias decidirán parte del futuro de la reestructuración del sistema financiero».

Por último, el informe afirma que «el logro del
crecimiento económico es la variable que posibilitará o no la reestructuración tanto de la deuda pública como privada».

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