24 de julio 2003 - 00:00

La caída del desempleo será mayor en el interior

La caída del desempleo será mayor en el interior
Las cifras de desocupación que se difundirán la próxima semana arrojarán un dato interesante: la caída en la desocupación que se registrará en muchas jurisdicciones del interior del país supera ampliamente a la media nacional. Cuando todavía falta procesar un porcentaje menor de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH), ya hay algunos anticipos: en Neuquén el desempleo bajó 5 puntos desde octubre del año pasado (de 18% a 13%), en Rosario se redujo 2 puntos (de 19% a 17%), en Bahía Blanca retrocedió 1 punto (de 18% a 17%) y en Mendoza cayó entre 1 y 1,5 puntos.

Ya en la medición de octubre pasado, el desempleo en los 27 aglomerados urbanos (que no incluye a la Ciudad de Buenos Aires y a los Partidos del conurbano bonaerense), se redujo por encima de lo que sucedió en el total nacional. Y esta tendencia tiene un sentido: es que el poco crecimiento que registra la economía (5,4% de aumento interanual en el primer trimestre del año) está impulsado por el sector productor de bienes y, en la mayoría de los casos, esos sectores se radican en el interior del país. Según los datos del Ministerio de Economía, la producción de bienes creció 11,5% en el primer trimestre del año, en tanto la producción de servicios, que es la principal actividad económica de la Ciudad de Buenos Aires, sólo aumentó 1,5% en esos meses.

• Crecimiento

Es decir, aunque sea escaso, el crecimiento que se registra está liderado por las provincias, desplazando a la Capital Federal como principal generadora de riqueza (previo a la crisis explicaba sola más de 25% del PBI). Así, por primera vez en años, las provincias se ubican a la cabeza en la generación de empleo, como quedará confirmado cuando se difundan los datos finales de desocupación.

Ya hay igualmente datos oficiales que confirman esa tendencia: según los datos del Ministerio de Trabajo, entre octubre de 2002 y mayo pasado el empleo en el Gran BuenosAires solo creció 1,3%, mientras que en Mendoza subió casi 5%, en Rosario casi 4% y en Córdoba 4.2%.

No hay que olvidar igualmente, que por lo menos seis puntos de desempleo se lograron reducir sólo por efecto de los planes de empleo. Basta recordar que la desocupación a octubre pasado (17,8%) sube inmediatamente a 23,6% si se consideran desocupados a todos los ocupados en planes de empleo. Sin embargo, no fueron sólo esos planes lo que redujeron el desempleo entre octubre de 2002 y mayo de este año: hay una recuperación firme en muchas empresas radicadas en el interior del país que explican esos niveles de caídas. Según datos del INDEC, en el primer semestre del año, la industria generó casi 20 mil nuevos empleos. Y a eso hay que sumar el empleo indirecto: según un reciente estudio del Centro de Estudios para la Producción (CEP), por cada 10 puntos que crece la producción de la industria manufacturera el empleo directo sube en casi 3%, mientras que el empleo indirecto, sobre todo en el sector servicios, se incrementa en 1,29%. Así, dado que en el ultimo año la industria manufacturera creció 15,3%, entonces entre empleo directo e indirecto se debieron haber generado un aumento de 6,3% en el empleo total. Datos de la Secretaría de Trabajo de Santa Fe, indican que sólo en Rosario se crearon 3.000 nuevos empleos en el primer semestre del año, ligados fundamentalmente a la construcción, transporte y turismo. En Mendoza se estima que sólo ligados al reflorecimiento de la industria textil se generaron casi 1.000 nuevos empleos. En cambio desde Bahía Blanca explicaban a este diario que en esa ciudad la recuperación apenas se sintió en los últimos meses, con la excepción del sector agropecuario, lo que explica que sólo redujo en un punto la desocupación.

Hay algo que no captarán las estadísticas oficiales: existen muchas ciudades intermedias que florecieron gracias al turismo o la reactivación de algunos productos locales que habían quedado rezagados durante la convertibilidad adonde no llega la medición de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH) que se utiliza para medir la desocupación. Tal es el caso de ciudades limítrofes con Chile localizadas al sur del país (Bariloche, Villa La Angostura o San Martín de los Andes), o en el nordeste como Iguazú. Según explica desde Posadas (Misiones), la economista
Claudia Peirano, «hay ciudades como El Dorado donde bajó muchísimo la desocupación por la reactivación de los aserraderos», y otras como Posadas donde hubo interesantes inversiones en comercios.

• Preocupación

Este último punto, en cierta forma comienza a preocupar: con la crisis florecieron una gran cantidad de microemprendimientos. Desde Mendoza, Misiones, San Juan y Neuquén destacaban ayer a Ambito Financiero la cantidad de comercios que se abrieron en los últimos meses. Sin embargo, el escaso ritmo de aumento en el consumo y la apreciación del peso que reduce las ventajas, sobre todo en el turismo limítrofe, podrían terminar abortando ese proceso de creación de empresas en los próximos meses si esta recuperación no se afirma. En Mendoza, donde creció muy fuerte el índice de demanda laboral, ya se advierte la menor afluencia del turismo, que fue un fuerte impulsor del crecimiento en muchas ciudades chicas de esa provincia el año pasado, por la apreciación del peso. Igualmente, esa merma se compensa con una importante cantidad de pequeñas bodegas que reabrieron y ya están exportando. Lo mismo sucede con la producción y exportación de conservas y secadoras de frutas. Sin embargo, el economista Sergio Olivieri, de la sede Cuyo del IERAL, advirtió ayer a este diario que en Mendoza hay más empleo, pero también más precario.

Dejá tu comentario

Te puede interesar