Ofrecerán a provincias canje de deuda por $ 4 mil millones

Cavallo y Colombo el sábado en Olivos

El gobierno les ofrecerá en las próximas horas a los gobernadores de las 16 provincias con mayores dificultades financieras un acuerdo que no podrá rechazar: renegociar la deuda de corto plazo que tiene con la banca privada según un programa que estire los compromisos hacia el futuro. Según la iniciativa que el sábado le expuso Domingo Cavallo a Fernando de la Rúa, el principal beneficio de esa idea es retirar a las provincias del mercado de demanda de fondos en la banca privada e inducir una efectiva baja de la tasa de interés porque habrá mayor oferta de dinero disponible.

Esta suerte de magacanje provincial lo redondean en estas horas los técnicos del Ministerio de Economía, que esta semana deben entregarle a su jefe el proyecto final de lo que Cavallo cree es la piedra fundamental de una nueva etapa de su gestión que se inicia el lunes 15, cualquiera sea el resultado electoral. Aquí las principales líneas del programa que, vaya saber por qué, De la Rúa mantiene fuera de la atención de los economistas radicales de su gabinete (como, por caso, Chrystian Colombo y Adlaberto Rodríguez Giavarini):

• El plan busca reprogramar vencimientos a corto plazo que tienen las provincias por cerca de $ 4 mil millones y llevarlos al mediano y largo plazo. El mecanismo es un préstamo que gestionará el gobierno nacional con organismos internacionales y ofreciendo la mejor caución disponible, que son los fondos recaudados por aplicación de la llama ley del cheque.

• Este tributo no es hoy coparticipable pero dejará de serlo cuando la Cámara de Diputados convierta en ley el proyecto que ya tiene media sanción de los senadores. Cuando esto ocurra las provincias estarán en condiciones de llevarse cerca de $ 70 millones por mes, sobre el total mensual que hoy se recauda, algo así como $ 400 millones.

• Para Cavallo el mejor destino de esos fondos a coparticipar en cuanto se apruebe la ley no es girarlos a las provincias para que los gasten, sino «bancar» un préstamo por el total de la deuda de corto plazo, que hoy pesa esos $ 4 mil millones. Para terminar de convencer a los gobernadores que ya han sido consultados y han manifestado su interés en este megacanje, la Nación ofrece poner a disposición del aval de ese préstamo cerca de $ 2.600 millones de los que le corresponden del reparto del impuesto. Los $ 1.400 millones restantes son lo que pondrían los gobernadores.

• La idea de acercar esta solución la mira Cavallo con interés porque le permite ilustrar ante el Presidente su evaluación de esta elección: hay que reforzar la relación con aquellos gobernadores con dificultades financieras pero que no quieren cambiar el «modelo» que aplica el gobierno nacional. Es decir, con los de extracción peronista. Esta elección muestra que los gobernadores radicales no están en esa línea de colaboración con la oficina de Cavallo. Más bien lo contrario: hacen campaña electoral contra el ministro y prometen, como Raúl Alfonsín o Leopoldo Moreau, desalojarlo si ganan las elecciones.

• A este perfil de la campaña atribuye Cavallo las marcas récord de la última semana en el cálculo del riesgo-país: en todas las democracias -argumenta- gobiernan los que ganan las elecciones y en la Argentina la economía está en manos de un candidato que las perdió. Además es combativo por quienes dicen que van a ganar las próximas elecciones. Es difícil explicar a los inversores que la costumbre pampa de decir una cosa y hacer otra es la clave de toda gestión pública en la Argentina. Así como explicar que gobiernan quienes pierden en las urnas.

• Por eso, afirman en Economía, hay que fomentar las buenas relaciones con los gobernadores peronistas porque en la noche del 14 de octubre se van a sumar los votos y van a haber ganado en número de votos los que apoyan, aun en dificultades, el tipo de solución que ofrece Cavallo, es decir el peronismo. Esa gente, dirá el mensaje de Cavallo a los inversores, tiene más votos que quienes me critican.

• Para consolidar este cuadro es que Cavallo les ha ofrecido a los gobernadores peronistas todo lo que puede brindar: primero fue la coparticipación de los fondos de la ley del cheque; ahora es negociarles con la banca privada este megacanje y correr con el compromiso de «bancar» el crédito que calza la operación con un buen porcentaje de lo que le va a tocar a la Nación.

• La baja de la tasa, en la explicación que hace Cavallo del proyecto, vendrá del hecho de que el megacanje provincial saca a los estados de la puja con el sector privado ante los bancos para obtener fondos, que es según el ministro una de las principales causas de que la tasa esté tan alta.

• En lo político es inmejorable para el retrato que borda el ministro para la mañana del 15 de octubre: sentarse con los peronistas que obtuvieron la mayoría de votos a firmar la eximición, aunque temporaria, de sus principales desvelos financiero y dándole el mejor uso al principal activo que son esos fondos del cheque. En el mismo terreno la relación con el peronimo le sirve al gobierno para darle seguridad y legitimidad al megacanje grande que hizo el gobierno. Esto es necesario para despejar la inquietud que, dice Cavallo, gana a algunos funcionarios de la banca privada cuando leen en los diarios que la Justicia o la Auditoría General de la Nación van a mover las denuncias de Elisa Carrió y Mario Cafiero sobre esa negociación. A esos gestos atribuye Economía influencia en el crecimiento del riesgo.

• En el programa del megacanje no entran, desde ya, las provincias grandes como Buenos Aires y Córdoba, que tienen bancos provinciales que les permiten otros recursos para capear la crisis que no poseen las otras, que privatizaron sus entidades en la década de los años '90. Pero igual Cavallo está dispuesto a ayudarlas en esta coyuntura, como ya lo viene haciendo con recursos que a veces les niega a distritos más chicos.

• A Buenos Aires, por caso, la auxilió en los últimos diez días con $ 50 millones que la gobernación de La Plata necesitaba para pagar el vencimiento de un papel colocado en el mercado europeo. El viernes pasado Carlos Ruckauf devolvió esos fondos que le permitieron cumplir airosamente con los inversores.

• Con la misma caballerosidad auxilia en estas horas Cavallo a la administración de José Manuel de la Sota. Córdoba está en plena privatización del banco provincial con auxilio de un crédito del Banco Mundial. Este organismo observó en el último mes que la ayuda era para vender el banco pero también la empresa eléctrica EPEC, trámite que está demorado. Cuando Cavallo se enteró de esa traba puso todos sus contactos con el Banco Mundial para convencer al board de que debe desembolsar la ayuda para entregar el banco sin esperar a que se resuelva la venta de la EPEC.