21 de noviembre 2023 - 00:00

En el exterior creen que Milei se moderará y será pragmático

Los analistas y gestores de mercados emergentes ponen una ficha al ganador, pero no se hipotecan. Esperan señales del gabinete y hoja de ruta de las reformas.

Jerome Powell

Jerome Powell

El resultado del balotaje puso nuevamente a la Argentina, aunque sea por un momento, en el radar de analistas e inversores internacionales. El accionar de solo unas cuantas nuevas órdenes de compra reanimaron a los activos locales. Pero se trataría de una, breve, bocanada de aire fresco ya que los informes preliminares, declaraciones y análisis externos destacan, por sobre todas las cosas, que la victoria libertaria sumerge al país en aguas inexploradas. De ahí que el impresionante rebote registrado, también desde aguas bien profundas, se explica por apuestas de cortísimo plazo hasta tanto se despeje el horizonte de nubarrones de incertidumbres. Lo cierto es que además de caracterizar al presidente electo como un anarcocapitalista que prometió dolarizar la economía, eliminar el Banco Central (BCRA) y un fuerte ajuste fiscal, destacando además el trillado tema de la gobernabilidad y todos los inconvenientes, desequilibrios y obstáculos que enfrenta la economía, la primera lectura que hicieron en el exterior es que Javier Milei asumirá ahora un enfoque pragmático moderando sus propuestas de campaña y su retórica, y que el hecho de que el país también sabe girar a la derecha es positivo para las acciones y los bonos.

Al igual que a sus pares locales, también en las mesas de operaciones internacionales sorprendió el amplio margen del triunfo libertario que le imprime una nueva dinámica al mercado. Así entre los especialistas en mercados emergentes existe la opinión que Milei será más pragmático y no llevará a cabo todas las medidas que conforman su programa político, sobre todo, por la escasa base de apoyo parlamentario. Destacan que la falta de mayorías en el Congreso no solo es un desafío sino que valoriza la alianza con el PRO. Por lo que esperan, cuanto antes, conocer al nuevo equipo económico, para ver qué tanta credibilidad puede generar. Por ende, estarán monitoreando día a día pistas claras sobre el nuevo gabinete y cómo se plasma el apoyo técnico del PRO. Claro que hasta el 10 de diciembre todo lo relacionado con la implementación de un plan de estabilización creíble y sus ajustes fiscales es también lo que seguirán muy de cerca, reconociendo que el riesgo de ejecución es muy alto dada la escasez de reservas en el BCRA, el nivel del déficit fiscal, todo en medio de una transición. Por eso, mientras se vayan conociendo los nombres de los ministros en las mesas de operaciones anticipan que persistirá la volatilidad en los activos argentinos, por lo menos, hasta tanto se conozca el cronograma de la agenda de reformas y quienes la implementarán.

Otro tema al que le prestan suma atención es a la política exterior de Milei, porque había adelantado que frenaría las relaciones con los principales socios comerciales, China y Brasil. Los analistas y gestores describen la política internacional del libertario como proestadounidense y antichina, ya que no negocia con comunistas, confirmando que sus aliados son Estados Unidos e Israel. Con relación, específicamente, a la dolarización persisten las dudas, se refieren a la idea como un “experimento económico” y ponen sobre el tapete un estudio de la Fed de Jerome Powell de las experiencias de Panamá, Ecuador y El Salvador que sugerían que podía ayudar a lograr una inflación más baja, estabilidad económica y crecimiento y fomentar la inversión extranjera, promoviendo la disciplina fiscal, un sistema financiero competitivo e integración económica con los mercados internacionales. Pero advertía que los países que implementan una dolarización completa debían establecer programas estructurales y reformas institucionales para garantizar que la estabilidad a corto plazo se convierta en un crecimiento económico a largo plazo. Al respecto, recuerdan la experiencia de la convertibilidad, a la que denominan una especie de dolarización suave que terminó en un fracaso total, con devaluaciones recurrentes del peso desde entonces. Los analistas son cautelosos a pesar que le otorgan el beneficio de la duda porque esta vez sería diferente, ya que Milei prometió “ir hasta el hueso” eliminando el peso y el BCRA. Pero son conscientes de que no hay reservas y se necesita una importante masa de dinero. De ahí que concluyen que la dolarización puede ser positiva, pero no será un camino fácil y requerirá más que simple retórica.

Dejá tu comentario

Te puede interesar