El delincuente que se encontraba prófugo tras el tiroteo en el que hirieron a Thiago Correa Medina, de 7 años, fue detenido por la Policía en las últimas horas. El hecho, ocurrido en el partido bonaerense de La Matanza, conmovió a la comunidad luego de que el menor -que finalmente murió- recibiera un disparo en la cabeza durante un intento de robo.
Detuvieron al ladrón que estaba prófugo tras el tiroteo en el que hirieron a Thiago Correa
Joaquín López Otto fue detenido por la Policía luego de permanecer varios días prófugo tras el tiroteo en el que murió el niño de 7 años.
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Thiago murió tras ser alcanzado por el disparo de un policía.
El operativo fue encabezado por el Grupo Táctico Operativo (GTO), que tras un primer allanamiento fallido continuó con tareas de rastrillaje en la zona. Finalmente, lograron ubicar al sospechoso en las inmediaciones de la calle 900 y avenida Central, en el barrio Villegas, Ciudad Evita.
Fuentes policiales informaron a Noticias Argentinas que fue un agente de civil, a bordo de su auto particular, quien reconoció al individuo mientras caminaba por la vía pública. El sospechoso, identificado como Joaquín López Otto, fue aprehendido en el lugar y quedó a disposición de la justicia. El fiscal de Homicidios de La Matanza, Diego Rulli, dispuso su traslado inmediato a una sede judicial.
El policía que disparó sigue detenido
Mientras tanto, continúa detenido Facundo Aguilar Fajardo, el agente de la Policía Federal Argentina que disparó durante el asalto y terminó matando no solo a uno de los delincuentes, sino también al niño. Está imputado por el delito de “homicidio simple con dolo eventual”, que contempla una pena de 8 a 25 años de prisión.
En su declaración ante el fiscal, el joven de 21 años aseguró: “Prefería que me mataran a mí antes que a Thiago”. Contó que esa noche fue atacado por cuatro personas mientras iba acompañado por su madre en el barrio Almafuerte, y que actuó en defensa propia.
“Si esos cuatro tipos no hubieran querido matarnos, esto no habría pasado y Thiago seguiría vivo”, dijo visiblemente conmocionado. Además, reveló que desde el hecho no deja de pensar en su hermanito, que tiene la misma edad que Thiago: “Él va a la escuela todos los días, y pensar que le pase algo como esto, que lo asalten o lo maten, me parte el alma”.
Sobre el momento del disparo, Aguilar afirmó que estaba completamente concentrado en los agresores y que su única intención era ahuyentarlos. “Lo único que quería era que se fueran”, remarcó. También describió el lugar como “muy oscuro”, con “postes de luz, una parada de colectivos y varios comercios” que dificultaban la visibilidad. “Era imposible que lo haya visto”, sostuvo.
La causa sigue avanzando con la detención del prófugo y la investigación centrada en esclarecer cómo se desarrollaron los hechos que terminaron con la vida de un niño inocente.
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