Fabián y Facundo Améndola, abogados de la familia de Fernando Báez Sosa, se encuentran a la espera de la sentencia de los ocho rugbiers al igual que toda la sociedad. Durante una entrevista con C5N, el padre de la dupla de abogados, explotó contra una pregunta y reveló algo "que nunca dijo en los medios".
Améndola, el abogado de Báez Sosa, explotó: "Ninguno de esos ocho puede ser hijo mío"
El letrado que representa a la familia de Fernando Báez Sosa reveló algo "que nunca dijo a los medios". El por qué del cruce en vivo con Diego Brancatelli.
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Durante la nota que ambos le dieron a Argenzuela, Fabián Amendola tuvo un cruce con Diego Brancatelli, cuando el periodista le planteó que era "soberbio" por pedirle a las familias con hijos con comportamientos problemáticos que "busquen un psicólogo". El abogado, en respuesta, aclaró que "no quiso sonar soberbio" pero que hay una diferencia entre los "que se ven involucrados en una pelea" cuando se van de vacaciones (como planteó Brancatelli) y "los que patean la cabeza de una persona desvanecida en el suelo durante un minuto".
El debate se fue calentando alrededor de como se pueden juzgar casos similares y cuál debe ser la actitud de los padres, hasta que Améndola explotó: "Ninguno llamó a sus padres y le dijo 'Che, viejo, me mande una cagada. Matamos a un tipo nos queremos morir'. ¿Sabés qué hicieron? Dijeron: 'Matamos a uno! Somos los demoledores! Vamos al centro a premiar!'". En ese contexto, el abogado se expresó de una forma que dijo "nunca haber usado en los medios": "Fernando, Dios quiera que esté en la gloria, se metió con un hijo de mil puta como es Thomsen que juró que lo iba a matar, lo señaló con el dedo, se cruzó la mano por la garganta y lo fue a esperar".
Visiblemente enojado, Améndola detalló que los rugbiers, a Baez Sosa, "lo emboscaron, estuvieron siete minutos al rededor del pibe, esperaron que la policía se fuera y lo molieron a palos hasta que lo dejaron muerto en el piso". "¿Entonces de qué me estás hablando? Ninguno de esos ocho puede ser hijo mío. Ninguno", sentenció el abogado parte del equipo de Fernando Burlando.
El letrado pidió disculpas por el momento álgido después de explicar que el "como actuaron después de un hecho es importante porque es una de las formas de saber que pensaba una persona al cometerlo" y, por lo tanto, la actitud posterior de los rugbiers comprueba "la intención homicida". Facundo, hijo de Fabián y también parte del equipo de abogados, agregó: "Hemos escuchado muchas cosas desde una desinformación muy grande. Que fue una pelea, que merecen una pena de tres años, que no lo quisieron matar. Y nosotros sabemos como se reían de la situación y lo que hicieron antes y después".
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