La empresa OpenAI sorprendió al anunciar el desarrollo de una plataforma de empleo impulsada por inteligencia artificial, que apunta a transformar la forma en que empresas y candidatos se conectan. El proyecto plantea un desafío directo a LinkedIn y, de manera indirecta, a Microsoft, su principal socio tecnológico.
OpenAI lanza una plataforma de empleo con inteligencia artificial para desafiar el dominio de LinkedIn
Automatiza el vínculo entre postulantes y vacantes. De esta forma se incorporan las nuevas tecnologías al mercado laboral.
-
Cómo la inteligencia artificial está impactando en el mercado financiero
-
Estas son las 3 profesiones más elegidas por personas mentirosas, según la Inteligencia Artificial

OpenAI lanza su propia plataforma de búsqueda laboral.
El sistema elimina la necesidad de títulos académicos, currículums, solicitudes y procesos convencionales de entrevistas. En su lugar, los emparejamientos entre vacantes y postulantes se realizarán de forma automática a partir de un análisis contextual, con el objetivo de asignar recursos de manera eficiente y sin fricciones.
La directora ejecutiva de aplicaciones de la compañía, Fidji Simo, explicó que “la plataforma de empleos de OpenAI contará con candidatos experimentados y capacitados en todos los niveles, y oportunidades para cualquiera que desee poner en práctica sus habilidades”, y agregó que “utilizaremos IA para ayudar a encontrar las coincidencias perfectas entre lo que las empresas necesitan y lo que los trabajadores pueden ofrecer”.
La incorporación de la inteligencia artificial al mercado laboral
La propuesta se apoya en la convicción de que en el futuro casi todos los empleos requerirán competencias en inteligencia artificial. Por ese motivo, la compañía proyecta la creación de una OpenAI Academy, destinada a capacitar a los trabajadores seleccionados y a perfeccionar su desempeño en entornos laborales atravesados por la automatización, de acuerdo con lo informado por Fast Company.
En paralelo, el sector de recursos humanos se encuentra en un momento particular: mientras áreas como el marketing, las finanzas y la asistencia personal ya adoptaron procesos automáticos, la contratación laboral continúa resistiendo, apoyada en valoraciones subjetivas vinculadas a la apariencia, la puntualidad o el contacto visual.
La competencia con Linkedin
En los últimos años, LinkedIn jugó un rol central en la digitalización del reclutamiento, aunque también se convirtió en un terreno fértil para fraudes vinculados a la IA. Según Fast Company, proliferaron perfiles falsos creados por algoritmos, entrevistas realizadas por avatares inteligentes y compañías ficticias diseñadas para captar dinero o datos personales.
Hoy el mercado laboral está saturado de currículums, cartas de presentación y portafolios generados por IA, mientras las empresas utilizan programas automatizados de filtrado antes de llegar a entrevistas finales, que incluso pueden ser conducidas por avatares.
La Harvard Business Review advirtió en 2022 que estas entrevistas automáticas corren el riesgo de ignorar señales no verbales —como expresiones faciales, tono de voz o lenguaje corporal—, que pueden ser clave para identificar cualidades como la curiosidad o la resiliencia. Sin embargo, expertos señalaron que estas mismas características suelen estar atravesadas por sesgos raciales, de género o de clase social.
La colaboración de Microsoft
El lanzamiento de la plataforma tiene un costado estratégico que afecta directamente a Microsoft, propietaria de LinkedIn y principal proveedora de servicios en la nube de OpenAI. Según Financial Times y Barron’s, la relación entre ambas compañías se tensó luego de que se confirmara que OpenAI trabaja con Broadcom en el desarrollo de sus propios chips de inteligencia artificial.
Desde 2019, Microsoft invirtió u$s13.000 millones en OpenAI. Aun así, no posee acciones directas, sino que recibe una parte de los beneficios futuros. La compañía de Sam Altman, que combina un modelo sin fines de lucro con una filial de beneficio público, analiza cuál será la participación de Microsoft en su eventual reestructuración.
Mientras tanto, OpenAI expandió su red de alianzas tecnológicas con Oracle y CoreWeave, diversificando el suministro de recursos informáticos más allá de la infraestructura de Azure.
La irrupción de OpenAI plantea dudas sobre el futuro de la intermediación laboral. Si bien la automatización promete eficiencia, también genera interrogantes sobre la pérdida de elementos intangibles que históricamente influyeron en la contratación.
La pregunta central sigue abierta: ¿podrá la inteligencia artificial reemplazar los juicios humanos sin sacrificar la imprevisibilidad y la complejidad propias de la interacción laboral?
Por ahora, lo cierto es que OpenAI decidió desafiar de frente el modelo de LinkedIn, y con ello puso en tensión no solo el futuro del reclutamiento, sino también la relación estratégica con Microsoft, su socio y al mismo tiempo potencial competidor.
Dejá tu comentario