Riesgoso: crece malestar en las filas policiales

Esta semana fue notoria la escalada de reclamos salariales en el sector, a cargo de la delicada misión de velar por la seguridad pública. En algunos casos, incluso, se llegó al punto del autoacuartelamiento.
Ayer fue el turno de Córdoba, donde alrededor de 25 mu-jeres con máscaras blancas cubriéndoles el rostro, identificadas como «esposas de policías autoconvocadas», realizaron una protesta frente a la Guardia de Infantería de la Policía de la provincia, en reclamo de «un sueldo básico de
2.500 pesos» para sus esposos. El martes, el mismo grupo concretó una marcha en la plaza Alberdi de barrio General Paz, oportunidad en la cual las mujeres estuvieron acompañadas por oficiales y agentes retirados y del Servicio Penitenciario.
En rigor, la radiografía de los reclamos muestra planteos además en San Luis, San Juan, Mendoza, entre otros distritos.
El caso más grave se vivió en territorio sanluiseño, donde los policías se autoacuartelaron durante casi una semana, con exigencias de recomposición de sueldos (la medida de fuerza fue levantada en la madrugada del pasado sábado). En San Juan, en tanto, se produjo un principio de acuartelamiento.
En ambos casos, el malestar fue acallado por los anuncios de aumentos salariales concedidos por Alberto Rodríguez Saá y José Luis Gioja.
Quejas similares se vivieron además en la capital tucumana -desde la Dirección de Patrulla Urbana-y desde las fuerzas penitenciarias mendocinas, lo que puso en estado de alerta al gobierno del radical Julio Cobos.