Tal cual lo había adelantado este diario el lunes en Charlas de Quincho, el presidente de San Lorenzo, Rafael Savino, que había renunciado a su cargo en la AFA como gesto de protesta por los arbitrajes (rechazada en el acto), expresó anoche su voluntad de continuar en funciones.
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El principal motivo que esgrimió el titular de San Lorenzo fue el apoyo que recibió de otros dirigentes, pero habría pesado mucho más el llamado telefónico de la señora de Julio Grondona, quien en forma poco amistosa le recordó ciertos compromisos.
En una maniobra destinada a mostrar un gesto de protesta por los arbitrajes que afectaron a San Lorenzo, Savino presentó el martes su renuncia a su cargo de secretario general de la AFA, no con la voluntad real de abandonar el cargo, sino con la idea de jugar esa «carta» en la interna política del club de Boedo.
El movimiento de Savino no fue tomado con seriedad por los representantes de los clubes en AFA, que recibieron la renuncia del titular de San Lorenzo con indiferencia, aunque oficialmente informaron que la habían rechazado, luego de considerarla con detenimiento.
Sin ánimo de que se interpretara la renuncia como una disidencia en el marco de verticalismo y disciplina política que impera en la AFA, Savino, finalmente, se retractó de sus actos.
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