Jugó en varios clubes de fútbol profesional, pero un antidoping positivo y una condena a 75 años de prisión acabaron con su carrera

Un exjugador de fútbol mexicano recibió una condena por secuestro y nexos con el peligroso Cártel del Golfo.

Omar "El Gato" Ortiz, de una carrera deportiva que parecia brillar, a una vida personal llena digna de un guión de teeror

En muchas telenovelas o series, la trama gira en torno a bandas de secuestradores, fortunas, organizaciones criminales, narcotráfico, el mundo de la fama o problemas de adicciones. En México, cuna de las tramas de ficción, las historias reales suelen superar por completo los guiones televisivos.

Omar Ortiz, reconocido arquero del fútbol mexicano, es un claro ejemplo de cómo la realidad puede superar a la ficción de las telenovelas. El "Gato" , apodo con el que fue bautizado en el deporte, jugó en equipos como Monterrey, Necaxa y Jaguares, además de participar en la Copa Oro de 2002. Conocido por su habilidad en el arco, su carrera cambió drásticamente tras un positivo por dopaje en 2010 y, poco después, su vinculación con actividades delictivas.

Omar Orti jugó en la selección de México, pero no supo controlar su adicción por la oximetolona y la dromostanolona que lo llevaron a ser sancionado por la Federación de Fútbol mexicana

La historia de Omar el "Gato" Ortiz, el futbolista mexicano acusado de secuestro e integrar el Cártel del Golfo

El "Gato" nació en 1976 en Monterrey, Nuevo León, ciudad donde dio sus pasos en el futbol. desde 1997. Vistió la camiseta de clubes como Celaya, Necaxa y Jaguares, ganándose un nombre como arquero destacado. Sin embargo, su vida fama deportiva se derrumbó en 2010 cuando fue suspendido por dopaje tras encontrarse sustancias prohibidas en su organismo. Pero eso solo fue el comienzo de una caída hacia el abismo.

En 2012, fue detenido en Monterrey por colaborar con una célula criminal vinculada al Cártel del Golfo, una de las organizaciones delictivas más peligrosas de México. Las acusaciones indicaban que el exfutbolista había facilitado información sobre posibles víctimas de secuestro, por lo que recibía dinero a cambio.

Se le atribuyó participación en al menos tres secuestros, incluyendo el del esposo de la cantante Gloria Trevi, Armando Gómez, y el de una menor de edad. En 2019, luego de siete años de proceso judicial, el Ortiz fue condenado a 75 años de prisión la ser hallado culpable en dos de los tres casos.