La vida deportiva de Martín Palermo está llena de goles raros y momentos de película. El increíble gol de ayer frente a Vélez de cabeza apenas cruzando la mitad de la cancha fue su gol número 200 en el fútbol argentino, siendo el décimo jugador en la historia del fútbol argentino.
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Uno de los primeros goles de Palermo que se nos viene a la cabeza es el que le convirtió a Independiente el sábado 24 de febrero de 2007 por el Apertura en cancha de Racing. Boca ganaba 2 a 1 y Palermo robó la pelota detrás de mitad de cancha, vio a Oscar Ustari adelantado y le pegó desde allí, clavándola por arriba del arquero.
También es muy recordado el gol de penal a Platense del sábado 24 de abril de 1999, cuando el "Titan" pateó un penal tan imperfecto que la pelota le rebotó en ambos pies y luego se coló en el arco defendido aquella noche por Fabián Cancelarich. Aquella noche ganó Boca por 2 a 0 como visitante.
Una de las noches más amargas de la vida deportiva de Palermo fue la del 13 de noviembre frente a Colón, cuando se rompió los ligamentos cruzados de su rodilla derecha. Sin embargo, el delantero se llevó un sabor agridulce antes de salir del campo de juego, ya que logró marcar un gol más allá de su condición.
Otro tipo de goles que también son una marca la carrera de Palermo son los denominados raros. Tal vez el máximo exponente de este tipo es el que le convirtió a San Lorenzo en la Bombonera el 23 de mayo de 1999, cuando tomó la pelota en el flanco derecho de ataque y mando un centro tan cerrado que se coló en el segundo palo de un descolocado Oscar Passet. El partido finalizó 3 a 1 para Boca.
Finalmente, vale la pena traer a la memoria el golazo de chilena frente a Banfield el 20 de octubre de 2004 en el empate 1 a 1 en cancha de Boca. El "Titan" con muy poco espacio logro dibujar una chilena que se coló contra un palo.
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