Participó en los Juegos Olímpicos como atleta pero murió al naufragar desde Somalia a Italia

Una atleta olímpica somalí que compitió en los Juegos Olímpicos de Beijing 2008 falleció trágicamente al intentar llegar a Italia huyendo de la pobreza.

Participó en los Juegos Olímpicos como atleta pero murió al naufragar desde Somalia a Italia

Cada vez que llega una nueva edición de los Juegos Olímpicos, trae consigo varios recuerdos. Son miles los deportistas que participan, pero solo algunos logran alcanzar la empatía del público a pesar de no subir al podio. Este es el caso de Samia Yusuf Omar, la atleta somalí que compitió en Beijing 2008 y que falleció en un naufragio.

Samia participó en la primera serie de la prueba de los 200 metros. A pesar de no lograr la clasificación y de haber terminando última, el público se puso de pie para aplaudir a esa pequeña niña de 17 años que, a diferencia de sus contrincantes, vestía largos leggings negros y una camiseta blanca. Ropa que le había prestado la expedición de Sudán, ya que su país la envió a la competencia si la ropa para hacerlo.

Samia Yusuf Omar, la atleta que en los Juegos Olímpicos de Beijing 2008 conquistó el corazón de todo el público

Quién es Samia Yusuf Omar, la atleta que murió huyendo de la pobreza

Samia nació en Mogadiscio, Somalia, en 1991. Al igual que su madre encontró en el atletismo un refugio frente a la violencia y la pobreza de su país. A raíz de esté conflicto, la joven contó: "En muchas ocasiones me cruzaba con barricadas instaladas por tropas del gobierno junto con etíopes o milicias armadas", para explicar el contexto en el cual vivía y se entrenaba para los Juegos Olímpicos.

Después de Beijing, La atleta regresó a su país, donde las continuas amenazas por parte de los musulmanes más radicales, que veían inapropiado que una mujer practicara deporte, seguían creciendo. Sin embargo, Somalia puso toda su esperanza de clasificarse para los Juegos Olímpicos de Londres 2012, pero la situación en su país empeoró, y su familia fue obligada a vivir en un campo de desplazados.

Decidida a seguir con su carrera, su madre vendió un terreno para financiar su viaje a Italia, donde Samia planeaba entrenar y buscar un futuro mejor. Pero el destino golpeo una vez más a la familia Omar al enterarse que la joven murió cuando el barco en el que viajaba naufragó. Su historia refleja no solo la lucha de una atleta por sus sueños, sino también el desesperado intento de muchas personas por escapar de la pobreza y la guerra.