River luchó 90 minutos y, cuando se conformaba con un empate ante Junior, en Barranquilla, encontró el triunfo en el tiempo adicional. Primero, con un penal ingenuo de Amara a Farías que el mismo delantero convirtió y, después, con un tiro libre ejecutado con maestría por Sambueza.
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Con este triunfo, quedó primero en el grupo 5 de la Copa Libertadores, con puntaje ideal, tras ganar los tres partidos que disputó, y prácticamente se clasificó para la segunda ronda. Junior salió a presionar de entrada contando con la habilidad de Omar Pérez y con la potencia de Arzuaga, y creó media docena de situaciones claras de gol que conjuró Costanzo, de muy buena labor.
En la segunda etapa, con la entrada de Gastón Fernández por Salas, River ganó en movilidad, adelantó sus líneas y planteó el partido de ida y vuelta.
Tuvieron situaciones claras los dos, entre ellas, un remate de Arzuaga en un poste, y una de Farías que tapó muy bien Carlos Pérez.
En los últimos minutos, se notó a todos los jugadores cansados por el gran calor de Barranquilla, y cuando parecía que ambos se conformaban con el empate, surgió la jugada del penal con un Farías de espaldas al arco y saliendo del área, al que Amara cruzó mal. River se encontró con un triunfo inesperado y, después, aprovechó la desesperación de los colombianos para, en un contraataque, encontrar un tiro libre que Sambueza transformó en gol.
El equipo de Astrada se vuelve a Buenos Aires con más de lo que esperaba y con la primera ronda de la Copa Libertadores debajo del brazo.
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