A un poco más de una semana de que termine el año, el Gobierno decidió realizar menos consumos de los que tenía previstos. Según se publicó hoy en el Boletín Oficial, el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, y el ministro de Economía, Axel Kicillof, decretaron reducir los gastos de la administración pública por $ 145 millones en total.
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El recorte lo sufrieron principalmente las provincias, por una caída en sus transferencias por $ 323 millones. Además, redujo los desembolsos a AySA por $ 136,1 millones y la asistencia social al personal por $ 514,8 millones, según consta en la decisión administrativa 77/2013.
La baja en los giros a los gobiernos provinciales fue canalizado a través del Ministerio de Planificación, que por diversas cuentas recibió $ 462,2 millones menos de los presupuestados.
Por otro lado, el Gobierno aumentó los gastos del Ministerio de Desarrollo Social y del de Seguridad. A la cartera de Alicia Kirchner se la benefició en $ 397,5 millones adicionales y a la que nuclea a las fuerzas del orden interno en $ 120,2 millones.
A través de otra resolución, la 78/2013, la Secretaría General de Oscar Parrilli también recibió otros $ 48,1 millones a los que le habían sido girados en el año.
Con el sobrante, el Estado aumentó la compra de los activos financieros. Las aplicaciones financieras disminuyeron en $ 249,2 millones y las fuentes financieras en $ 517,4 millones.
En tanto, el Poder Ejecutivo reasignó partidas internas del Ministerio de Defensa. Esto fue difundido por la decisión administrativa 81/2013, que también lleva la firma del encargado de esa cartera, Agustín Rossi.
En los días hábiles que faltan para que termine 2013, el Gobierno aún tiene tiempo de realizar los usuales ajustes de fin de año, ya que la de la fecha fue por un monto bajo comparado con los usuales.
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