17 de agosto 2004 - 00:00

Caetano Veloso, estupendo, en cualquier idioma o género

A los temas de su disco «Foreign sound», dedicado a canciones en inglés de distintas épocas y estilos, Caetano Veloso sumó un exquisito repertorio de clásicos y estuvo, como siempre, entre lo mejor del año musical.
A los temas de su disco «Foreign sound», dedicado a canciones en inglés de distintas épocas y estilos, Caetano Veloso sumó un exquisito repertorio de clásicos y estuvo, como siempre, entre lo mejor del año musical.
Presentación de «A foreign sound». Caetano Veloso (voz, guitarra). Con J. Morelenbaum (cello, dir. mus.), P. Sá, L. Galvo (guitarras), J.H. Rodrigues (contrabajo), L. Costa ( percusión), C. Gomes ( batería) y orquesta de cuerdas. (Teatro Gran Rex, 12 al 15/8.)

Caetano Veloso es un instrumento perfecto que solamente él sabe pulsar, que conoce al detalle cada una de sus posibilidades y es capaz de explotar al máximo.

En ese doble lugar de objeto y sujeto sonoros, importa poco lo que canta o con qué formato se presenta.

Convierte en metal precioso todo lo que toca, es internacional como pocos y brasileño como ninguno. En una vida musical que no ha tenido puntos débiles, pasó con total tranquilidad de la tropicalía a la bossa nova más clásica junto a Joao Gilberto, del rock and roll a la canción tradicional latinoamericana, de los textos y las melodías eruditos a la canción pop, propia o ajena. Y se rodea de músicos según esas necesidades.

Desde hace ya tiempo, su principal compañero es el cellista y gran arreglador Jacques Morelenbaum, motor central también de estos shows. Pero así como muchas veces el respaldo está en las cuerdas -un conjunto argentino que reemplazó a la orquesta brasileña del disco-puede pasar al pequeño conjunto de cámara, un poco clásico, un poco pop, o simplemente a la guitarra.

Se mueve con movimientos plásticos o toca y canta en pose de concertista circunspecto. Pero hay otro elemento que conoce pocos paralelos en el mundo: su voz, que se adapta a cualquier género, que puede ser la más enérgica o la más dulce.

Estos recitales tuvieron como eje principal la presentación de su último disco,
«A foreing sound», en el que -como hizo antes antes con «Fina estampa» dedicado a la canción latinoamericana-abordó un repertorio de temas en inglés de distintas épocas y estilos.

Fue de
Nirvana a Bob Dylan, de Paul Anka a Cole Porter o Stevie Wonder, pero también abordó sus propias canciones, evocó a Carmen Miranda y volvió sobre sus piezas más densas del álbum «Livro». Y paseó por un clásico de Noel Rosa («Nao tem traduçao»), una canción de Synval Silva («Adeus batucada»), y «Brasil pandeiro» de Assis Valente.

Como siempre que viene a Buenos Aires, estas actuaciones se convirtieron en uno de los puntos más altos de la temporada musical.

Dejá tu comentario

Te puede interesar