ONU apunta a Al Asad por crímenes de guerra en Siria
-
Una colchonería como cómplice, 14 ladrones escondidos en un camión y un golpe de 33 millones de dólares: así fue el mayor robo de la historia de Colombia
-
Más de 300.000 argentinos visitaron Uruguay desde el inicio de la temporada
En su último informe, del 11 de septiembre, la Comisión acusó al régimen de Al Asad de crímenes contra la humanidad y de crímenes de guerra, y a los rebeldes sirios de crímenes de guerra.
Los miembros de la comisión, entre los que se encuentra la exfiscal internacional Carla del Ponte, han acusado de crímenes en varias ocasiones a los altos responsables del régimen, aunque nunca los han nombrado, así como tampoco han mencionado nunca directamente al jefe del Estado.
La comisión, a la que nunca se le ha autorizado visitar Siria, basa su trabajo en más de 2.000 entrevistas realizadas desde su creación con personas implicadas en Siria y en los países vecinos. También ha realizado una lista confidencial, actualizada varias veces, de las personas sospechosas de haber cometido crímenes en Siria.
Esta lista fue transmitida a la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, aunque no la ha consultado.
Pillay explicó este lunes que esperaba que se desarrolle una investigación judicial "nacional o internacional creíble" que permita juzgar a los responsables de los crímenes.
En Damasco, el nuncio (embajador) de la Santa Sede en Siria, monseñor Mario Zenari, citado por la radio, afirmó que las religiosas sirias sacadas de un convento son "doce hermanas sirias y libanesas".
"Parece que los rebeldes yihadistas las condujeron hacia Yabrud, en el norte. No se conocen aún los motivos de esta acción de parte de los rebeldes: si se trata de un secuestro o de una toma de control del convento para tener las manos libres en Malula"", precisó el nuncio, quien se mostró prudente antes de hablar de secuestro.
El conflicto sirio comenzó en marzo de 2011 con una revuelta popular que se transformó en insurrección armada ante la sangrienta represión lanzada por el régimen.
El opositor Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH) estimó el lunes que alrededor de 126.000 personas han muerto en el conflicto en Siria desde marzo de 2011.
Este total incluye a unos 44.300 civiles, entre los que hay más de 6.600 niños y 4.450 mujeres, según el OSDH, con sede en Gran Bretaña.
El Observatorio también incluye en este total a más de 27.700 combatientes opositores y más de 50.900 combatientes leales al régimen de Bashar al Asad.
En tanto la violencia no mostraba señales algunas de calmarse. La Cruz Roja y la Media Luna Roja advirtieron el lunes que un millón de sirios carecen de alimentos básicos, ya que la guerra civil dificulta la entrega de ayuda humanitaria.
"Una estimación prudente se sitúa en un millón de personas sin alimentos", declaró Simon Eccleshal, de la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y la Media Luna Roja.
La Media Luna Roja Árabe Siria "sólo tiene acceso regularmente a alrededor de 85% del territorio en Siria", precisó Eccleshal.
"Estamos sumamente preocupados porque, con el comienzo del invierno, aumentará la cantidad de gente que necesita asistencia y se dificultará el acceso (...) a ellos", agregó.
En el terreno, los rebeldes sirios, entre los cuales hay yihadistas del Frente al Nosra, marcaron puntos al tomarse el lunes en la noche, después de tres días de combates, el control total de la ciudad cristiana de Malula, al norte de Damasco, anunció el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).
En la noche, al cabo de cinco días de combates, los rebeldes ocuparon el centro histórico de la ciudad lanzando desde un acantilado neumáticos llenos de explosivos contra las fuerzas del régimen.
Los combates seguían en la noche en los alrededores de Malula, según la misma fuente.
Según la agencia oficial Sana, los rebeldes habrían entrado al convento ortodoxo de Mar Takla, situado en el centro de la ciudad y hasta ahora controlado por el ejército, donde se encontraban 40 religiosas y huérfanos.
El nuncio (embajador) de la Santa Sede en Siria, monseñor Mario Zenari, citado por Radio Vaticano, afirmó que doce religiosas ortodoxas sirias y libanesas habían sido sacadas a la fuerza del convento.
Dejá tu comentario