¿Qué hacer con el pasado en un presente como éste? Es el título de la muestra que se exhibe en la galería Mamán con la curaduría y texto de Patricia Pacino, un ensayo de Daniel Capardi, artista visual, teórico, y dirección general de Guillermo Alonso. La muestra incluye obras de artistas insoslayables de nuestra historia del arte contemporáneo, comprometidos con el acontecer social, político y económico y cuya estética está ligada a la ética. El título está tomado de Dolores Cáceres que ha adoptado el significativo nombre de Dolores de Argentina, nueva incorporación al staff de artistas de la galería.
Pasado y presente en una muestra antológica
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En 1983 Nicolás García Uriburu (1937-2016), celebrando la democracia, tiñó de verde las aguas del Monumento a los Españoles, como lo hiciera en Venecia con su protesta en ese entonces ecológica. Presenta dos sillas pintadas de verde, con clavos punzantes, elevadas a la categoría de monumentos al político y al juez corruptos. Luis Benedit (1937-2011), en pequeña escala, hizo una maqueta que replicaba el antiguo Hotel de Inmigrantes, y Aldo Sessa (1939) fotografió al Obelisco. Rómulo Macció (1931-2016), referente esencial de nuestra pintura, rememora en un cuadro, famoso por lo evocativo, la llegada de los inmigrantes a Buenos Aires.
Luis Wells (1939-2023) realizó “Relaciones peligrosas”, una suerte de crítica a las relaciones carnales , expresión pronunciada por el canciller Di Tella que quedó en el imaginario colectivo de una parte de nuestra sociedad. Alberto Heredia (1924-2000) con su obra corrosiva, realizada con desechos, trapos, cajas de camembert, monumentos no convencionales para satirizar el poder logró despertar al argentino indiferente. Norberto Gómez (1941-2021) cuyas connotaciones viscerales en resina poliester describen el horror de la tortura en el ser humano.
Volviendo a Dolores Cáceres, (Córdoba, 1960), conocimos su obra en la casa del Bicentenario en ocasión de la muestra colectiva “Como un destello”: una dialéctica luz o oscuridad. Su obra nos sumergía en la luminosidad de unos tubos de neón que acompañaban antónimos: natural-artificial/culpable-inocente/libre-esclavo. La muestra devolvía cierta esperanza en un mundo oscuro. En la muestra de Mamán replica el formato de palabras en columnas de neón: “no vendo”: amistad-derechos, respeto-verdad, igualdad- vida, ética-libertad, amor –deseo, justicia-política, poesía- sangre, amistad-derecho, igualdad-vida, pobreza-nada. Todo un catálogo de su pensamiento político y ético. En su ensayo, Capardi reafirma que el lenguaje del arte en un escenario complejo y diversificado sea una reserva sensible para un nuevo comienzo. Esta muestra permite que el contemplador trate de responder a las preguntas que los artistas comprometidos proponen desde siempre. (Clausura el 15 de diciembre. Av. del Libertador 2475. Lunes a viernes de 11 a 20. Entrada libre y gratuita).
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