Izquierda pide reforma electoral

Raúl Castells

La mayoría de los partidos de izquierda confluyó ayer en que la verdadera solución al sistema electoral no se encuentra en traer veedores internacionales para controlar el escrutinio de las próximas elecciones de octubre, sino en debatir una posible reforma electoral que quite los diversos mecanismos-según ellos- fraudulentos.

A pesar de que no vieron negativa la presencia de los internacionales, se centraron sobre lo que según ellos es el verdadero problema. «El fraude proviene de otros mecanismos que la oposición de derecha no se encarga ni siquiera de denunciar, porque ellos mismos los usan», sostuvo ante este diario el primer candidato a diputado nacional por el Partido Obrero (PO), Marcelo Ramal, aludiendo así a las famosas colectoras que generalmente utilizan los partidos más grandes.

Luego de las quejas surgidas desde sectores lopezmurphystas y desde la mismísima Elisa Carrió, las izquierdas parecieron equiparar sus pensamientosen torno a un tema, algo raro si se tiene en cuenta la enorme dispersión existente dentro de esta ideología.

Rechazo

Sólo el mediático piquetero Raúl Castells rechazó tajantemente la posibilidad de que las urnas sean vigiladas por veedores estadounidenses, como lo pidió Carrió la semana pasada.

«De ninguna manera aceptamosque veedores de la OEA sean los que presencien el desarrollo de las próximas presidenciales, principalmente porque fueron sus políticas implementadas aquí y en otros países sudamericanos las que en gran medida nos llevaron a la pobreza e indigencia que existe actualmente», acusó el candidato presidencial por el Movimiento Independiente de Jubilados y Desocupados. De todas maneras, y tal como lo hicieron Ramal y el candidato a vice por el MST, Héctor Bidonde, Castells también resaltó el hecho de que «el fraude ya está impuesto en la Argentina por los diversos mecanismos como son las colectoras, los acoples y la ley de lemas que hacen que un candidato presidencial con tal o cual postura vaya con una boleta que tiene a un personaje con una visión totalmente diferente a quien acompaña». En esta línea también coincidió el apoderado del Partido de los Trabajadores Socialistas, Guillermo Pistonesi, integrante del Frentede Izquierda de los Trabajadores Socialistas (FITS).

«El fondo de la cuestión va a seguir sin solución en tanto y en cuanto no existan propuestas coherentes y unificadas que puedan extirpar del sistema el fraude indirecto, del cual es víctima la sociedad misma», dijo Pistonesi.

En cambio, el Partido Comunista (PC) se mostró a favor de que hayan veedores internacionales. En ese sentido el secretario de Relaciones Internacionales del PC, Jorge Krynes, sostuvo que «a pesar de que la función del veedor es limitada, su presencia sería más que positiva».

De todas maneras los dirigentes izquierdistas llegaron a una misma conclusión: «Que los problemas electorales se centran, entre otras cosas, en la enorme desproporción que existe entre la cantidad de fiscales de los partidos más grandes y los más chicos y en las diferentes formas encubiertas que siguen perpetuando indirectamente los comicios fraudulentos».