Cuando desembarcó en X, luego de comprar la red social por más de u$s44.000 millones, Elon Musk redujo el personal de la compañía de 7.500 empleados a tan solo 1.300. Ahora, más de un año y medio después, el magnate sudafricano afronta una demanda por negarse a pagar más de u$s500 millones en concepto de indemnizaciones a los empleados despedidos.
Elon Musk enfrenta una demanda millonaria de extrabajadores de X
El magnate dueño de X y sus demandantes tenían un plazo estipulado para llegar a un acuerdo. Según la acusación, Elon Musk se negó a pagar más de 500 millones de dólares a los empleados despedidos.
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Según el documento judicial, las demandas habían sido suspendidas en diciembre para que ambas partes puedan negociar un acuerdo. Sin embargo, la suspensión expiró el martes y las conversaciones entre demandantes y demandado no llegaron a buen puerto.
La millonaria demanda que afronta Elon Musk
El exingeniero de "X", Chris Woodfield, fue el encargado de presentar la demanda colectiva en julio de 2023 ante un tribunal federal de Delaware. Así, el antiguo ingeniero de la famosa red social acusó a Elon Musk de deber - al menos - u$s500 millones en concepto de indeminizaciones por despidos a extrabajadores.
En su llegada a Twitter - ahora X - Musk llevó a cabo una impresionante reducción de costos de la empresa. Entre las medidas tomadas por el multimillonario, la empresa redujo su personal de 7.500 personas a tan solo 1.300.
Según la denuncia, el grupo de extrabajadores afirma Musk violó una ley federal que regula los planes de beneficios para empleados al no respetar los términos de un plan de indemnización, que fuera establecido antes de que Musk adquiriera la compañía.
A pesar del conflicto, en diciembre del 2023 las demandas habían sido suspendidas para que X y los abogados de los demandantes pudieran negociar un acuerdo. Sin embargo, dicha suspensión expiró el martes sin que las partes lleguen a un acuerdo, lo que reflotó el proceso judicial.
Los números de X desde la llegada de Elon Musk
Tras su desembarcó como accionista mayoritario a Twitter - rápidamente renombrada como X -, Elon Musk planteó una revolución para la red social. Es que el magnate se propuso como objetivo mejorar la "libertad de expresión" en la aplicación.
Los cambios de cara a los usuarios plantearon una nueva era para la red social, aunque no todas estas modificaciones fueron bien recibidas por los usuarios más viejos de X. Musk cambió el nombre y el logo de la red social, implementó la posibilidad de subir videos sin límites de tiempo, así como también la posibilidad de pagar una suscripción mensual - conocido como X blue - para acceder a prestaciones específicas de la red social como el verificado y la posibilidad de monetizar el contenido de la red social.
En cuanto a la estructura interna, Musk también presentó grandes cambios en la compañía. El más relevante fue la reestructuración de su planta de empleados, reduciendo en un gran porcentaje el personal, decisión que al día de hoy todavía le trae conflictos.
En sus primeros años como dueño de X, la rentabilidad de la empresa no fue la que Musk esperaba. Sus decisiones llevaron a que la red social tenga un valor total de u$s19 mil millones para octubre 2023, lo que representó una caída del 55% del valor comparado a lo que pagó el sudafricano por la compañía en octubre del 2021.
La situación financiera parece no haber mejorado para 2024. Es que en enero del nuevo año, la firma Fidelity Investments, una de las principales de gestión de activos, marcó una disminución significativa en el valor de sus inversiones en X Holdings, que reflejaría una reducción del 71.5% en el valor de sus participaciones, destacando los desafíos y controversias que enfrenta la compañía.
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