Dos candidatos varados por caos aéreo

Costosa resultó para ambos la visita a la Casa Rosada para recibir la bendición de Néstor Kirchner en el acto de inauguración de obras de este lunes.
El gobernador, representante del Frente para la Victoria, y su rival de la sociedad Mopof-UCR perdieron toda la jornada de ayer gestionando una forma de regresar a Tierra del Fuego para cerrar la campaña electoral que culmina mañana.
Cóccaro finalmente logró «colarse» en un avión privado rentado por el Ministerio Salud de la Nación, que se dirigió a Río Gallegos con motivo de un evento.
Demorado por horas en Ezeiza, el mandatario recibió una mano del ministro Ginés González García y logró viajar a Santa Cruz y luego a Ushuaia junto con su secretaria y los legisladores nacionales Rosana Bertone y Mario Daniele.
Más complicado aún fue el periplo de Garramuño, que hasta barajó la posibilidad de embarcarse en un avión de carga. Con alivio, consiguió luego asiento en un vuelo privado, cuyo aterrizaje en Río Grande estaba previsto para la medianoche.
El intendente de Ushuaia planeaba trasladarse esta mañana por tierra hasta su ciudad. Mientras tanto, crecen las acusaciones entre el sector de Cóccaro y Garramuño, con el ARI como atento espectador, pensando que su candidata a gobernadora, Fabiana Ríos, tal vez saque beneficio de esta guerra electoral y se cuele en la segunda vuelta prevista para el 24 de este mes.
Entre los conflictos locales se destaca el problema que existe con las boletas de la lista de Garramuño luego de que se eliminó al segundo candidato a legislador, Pablo Wolaniuk, envuelto en un supuesto caso de corrupción con cámaras ocultas incluidas. A su vez, Juan Ladereche, ex abogado y apoderado de Cóccaro, entabla una fuerte arremetida contra el gobernador, con una serie de denuncias y la preparación de una presentación que incluiría grabaciones que afectarían a varios funcionarios del gobierno fueguino. Según señaló Ladereche a Ambito Nacional, la denuncia sería elevada a la Justicia «antes de las elecciones».