El piloto brasileño Felipe Massa volvió a pilotar, en el circuito Ricardo Tormo de Cheste (Valencia), el Ferrari F60 con el que la escudería italiana ha participado en el Mundial de F-1 de 2009 casi cuatro meses después de sufrir un aparatoso accidente en el Gran Premio de Hungría.
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Massa sufrió un accidente el 25 de julio en la segunda tanda de la sesión clasificatoria de la carrera después de que un artefacto procedente del coche de Rubens Barrichello (Brawn GP) lo golpeó en la parte frontal de su casco y lo dejó inconsciente.
El piloto brasileño, que tras el impacto se estrelló contra las protecciones de Hungaroring a casi 200 kilómetros por hora, tuvo que ser hospitalizado e intervenido de urgencia en el cráneo en el Hospital AEK de Budapest y dejar el certamen con siete carreras aún por disputarse.
Tras casi cuatro meses de recuperación, Massa volvió hoy a subirse a su F60 sobre el asfalto de Cheste, en el acto final de la Finales Mundiales de Ferrari, que han tenido como escenario el circuito de la Comunitat Valenciana.
Junto al piloto de Sao Paulo participaron en la exhibición de monoplazas de Ferrari el italiano Giancarlo Fisichella, que acabó la temporada en el lugar de Massa, Luca Badoer y el español Marc Gené.
Tanto Massa como Fisichella realizaron un pit stop al volante del F60, mientras que Gené y Badoer, probadores de la escudería de Maranello, rodaron con sendos F2008 de la temporada anterior.
El circuit de la Comunitat Valenciana Ricardo Tormo recibió desde el pasado jueves hasta hoy las Finales Mundiales de Ferrari, el festival de final de temporada de la escudería italiana que contó con la presencia de modelos emblemáticos de la mítica marca del 'Cavallino Rampante'.
Como remate de la fiesta, la jornada contó con la presencia del español Fernando Alonso, que la temporada próxima pilotará para Ferrari y que hoy obtuvo un permiso especial de Renault F1 para estar en Cheste y saludar a los aficionados.
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