Una llegada en silencio

El rostro de cansancio y preocupación de Martín Demichelis en el arribo del plantel de la Selección a Ezeiza. Los jugadores y el cuerpo técnico llegaron y no hicieron declaraciones.

El seleccionado argentino de fútbol regresó ayer por la mañana al país, tras el empate 1 a 1 ante Perú por las eliminatorias sudamericanas de Sudáfrica 2010.

Ninguno de sus integrantes realizó declaraciones, incluido el entrenador del equipo, Alfio Basile, quien ya está pensando en las convocatorias para los partidos que se vienen ante Uruguay y Chile.

La delegación argentina llegó provenientede Lima, en un vuelo de Aerosur, que tuvo una escala técnica en Santa Cruz de la Sierra, Bolivia. En la misma pista de aterrizaje un micro esperó a los integrantes del plantel argentino para trasladarlos de ahí directamente al predio que la AFA posee en Ezeiza.

Ni el cuerpo técnico, ni los jugadores tuvieron contacto con la prensa y todos se fueron hacia sus domicilios desde el predio de Ezeiza, sin realizar declaraciones.

Junto al cuerpo técnico y a los dirigentes volvieron 15 jugadores, porque seis se quedaron en Perú, para partir de allí hacia sus destinos europeos.

En Lima se quedaron Lionel Messi, quien lo hizo por pedido del Barcelona, Fernando Gago, Daniel Díaz, Gabriel Heinze, Fabricio Coloccini y Jonás Gutiérrez. Basile, en la conferencia de prensa luego del partido, mostró toda su tristeza por el empate, aunque reconoció como justo el resultado final.

El entrenador, quien evidenció escasa autocrítica, se lamentó por el gol del empate peruano en el tercer minuto de descuento,al tiempo que elogió la fuerza de los jugadores rivales para buscar la igualdad después de un partido muy peleado.

«Si nos hacían el gol en el minuto 40, estaba todo bien, me iba tranquilo; pero nos convirtieron después de querer retener la pelota en el banderín del córner, cuando ya se terminaba el partido. Que te empaten así es lo más duro que te puede pasar», reveló Basile.