Desconfianza en la bolsa porteña por la supuesta flexibilización del cepo.
Cuando el dólar oficial se disparó miércoles y jueves por el "laissez faire" del Banco Central, los bonos nominados en dólares escalaron y llegaron a aumentar 5% cada día. Con el anuncio de la flexibilización del cepo cambiario, el viernes los inversores aflojaron sus apuestas por los dólares blue, bolsa y "contado con liqui", por lo que cedieron los precios de los papeles de deuda.
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Pero este temporal voto de confianza no implica un desinterés total por estos instrumentos financieros, dado que se vislumbran dudas por el giro del Gobierno en cuanto a su política cambiaria.
Es más, con un nivel de reservas del Banco Central en u$s 29.100 millones, muchos analistas temen que las autorizaciones para acceder al billete estadounidense sean azarosas o simplemente dificultosas, como ocurrió cuando comenzaron las restricciones cambiarias en 2011.
La cautela se mostró en la cotización del contado con liquidación, que operó el viernes sin variaciones a $ 11. En cambio, hubo un retroceso del dólar MEP de más de cincuenta centavos a $ 10,60 y del informal de 1,36 pesos a $ 11,70. El primer tipo de cambio es el que se obtiene de la compra de títulos de deuda soberana en pesos y su venta en moneda extranjera, siempre dentro de la bolsa porteña. En cambio, con el "contado con liqui" los billetes se transfieren a una cuenta bancaria estadounidense.
Los bonos más utilizados para esta operatoria, el Bonar 2017 y el Boden 2015, cayeron cerca del 4% en la jornada. "Los papeles que pagan en dólares bajaron por la nueva decisión oficial, pero hay que ver qué ocurrirá el lunes. Si la AFIP autoriza obtener montos irrisorios, el precio de los bonos volverá al alza", anticiparon desde una sociedad de bolsa a ámbito.com.
"La mayor apertura fue una medida de urgencia por la falla del cepo, ya que recién van a analizar la implementación la semana próxima", interpretó otro operador con menores ánimos, quien también solicitó el anonimato por ser el dólar un tema sensible para el Gobierno. "Nadie se esperaba la sorpresa de la mega devaluación. Nos dejó a todos medio descolgados. Así que la flexibilización de la divisa oficial directamente no se pudo anticipar", admitió.
Quienes compraron activos en dólares a mediados de semana, perdieron dinero con la abrupta baja de los títulos públicos, pero ganaron los que los habían obtenido antes de la depreciación del peso. Las constantes reorganizaciones de carteras desafían a los menos atentos y no permiten un minuto de distracción.
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