17 de febrero 2023 - 10:39

El vino expande fronteras en Argentina y busca nuevos mercados

Mario González es el nuevo presidente de la COVIAR y dialogó con Ámbito respecto al presente y futuro de la industria.

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Economía Sustentable

La industria del vino atraviesa momentos complicados en diversos aspectos, desde las implicancias del clima hasta la coyuntura económica. Sin embargo, desde la Corporación Vitivinícola Argentina (COVIAR) no dejan de mirar con optimismo el Plan Estratégico 2030, que comenzó a principios del milenio y que se va ajustando a las nuevas realidades internacionales.

“Tenemos muy buena calidad para salir a pelearle al mundo”, dijo Mario González, nuevo presidente de la COVIAR que asumirá formalmente el cargo en el marco de la Fiesta de la Vendimia que comienza este 26 de febrero en Mendoza. En diálogo con Ámbito, el directivo que reemplazó a José Zuccardi, repasó el presente del sector e hizo hincapié en los objetivos hacia el futuro, con foco en la innovación, el turismo del vino, la sostenibilidad social y ambiental.

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Mario González, nuevo presidente de la COVIAR

Mario González, nuevo presidente de la COVIAR

De paso por Buenos Aires, el empresario oriundo de La Rioja sostuvo que “el año es complicado para la industria”. Por un lado, por la condiciones climáticas –heladas y la sequía-que están generando problemas en la producción de materia prima. De hecho, algunas bodegas reclamaron que se habilite la importación de uvas para poder seguir produciendo, algo que fue rechazado por el Gobierno y celebrado por COVIAR. En tanto que también el sector está afectado por las cuestiones macroeconómicas a las que se enfrenta toda actividad hoy en el país: precio del dólar, inflación, y problemas de financiamiento.

En ese escenario es que el Gobierno puso en marcha la semana pasada el programa Proviar 2, que apunta a desarrollar “innovación, inversión en tecnología, apostar también a la equidad de género, a la igualdad de género en el sector vitivinícola y apostar también al tema de las raíces; a tratar de construir mecanismos, a partir de la conectividad y a partir de las infraestructuras, que nos permitan generar arraigo en el interior del interior de la Argentina, que es donde hay un enorme valor por el esfuerzo y la producción que los argentinos tenemos que defender”.

El anuncio estuvo a cargo del ministro de Economía, Sergio Massa, quien resaltó la inversión de “10.000 millones de pesos en aportes no reintegrables” y aseguró que “sanjuaninos, mendocinos, rionegrinos, riojanos, todos aquellos que apuestan a la vitivinicultura, van a estar asistidos a partir de este programa que lo que pretende es seguir fortaleciendo esa marca, que en definitiva representa al vino argentino”.

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Producción y consumo de vino

Desde la entidad explican que ya hace tiempo que la producción viene a la baja. Los datos más frescos, que se conocieron hace apenas horas, indican que 2022 cerró con una caída en litros del orden del 20%. La producción de materia prima no viene con datos alentadores para la cosecha, una situación que se viene repitiendo en los últimos años.

Durante la pandemia el mercado tuvo un buen pasar gracias a que el aislamiento motivó un mayor consumo doméstico del vino, llevando el per cápita a 21 litros. Sin embargo, pasada esa etapa la curva volvió a descender. “Es una industria donde la oferta y la demanda juegan a la perfección, cuando hay mucha cosecha, hay mucha producción de vino, y los precios bajan. En pandemia hubo un crecimiento del consumo de vino y sacó stock; veníamos de años de precios bajos, y eso acomodó un poco los precios y a la industria”, comentó González. Pero advierte que con la menor cosecha “puede empezar a faltar producto” este año.

Si bien la característica del vino hace que regiones áridas sean las más propicias para vinos de calidad, el problema de la sequía es un factor relevante para la industria. Se necesita agua en zonas donde es escasa, y donde además se compite con la minería. Por eso González resalta la necesidad de trabajar en conjunto entre privados, los estados provinciales, y la Nación, para avanzar en las obras de infraestructura necesarias para garantizar el acceso al agua.

En busca de nuevos mercados para el vino argentino

Luego está la cuestión macroeconómica que opera sobre la producción y comercialización. Para el flamante titular de COVIAR es necesario un tipo de cambio único, que favorezca las exportaciones, y quizás una baja de retenciones. Sin embargo, más allá de esas medidas concretas, a lo que apunta es a mantener la competitividad frente a otros jugadores del mercado global que le disputan mercado a la Argentina. Entre esos están Francia, pero también Chile o Australia.

Un punto clave para eso es lograr que la producción sea certificada con estándares de sostenibilidad que hoy reclaman en varios mercados. COVIAR impulsa acciones en ese sentido desde el campo hasta la comercialización. Y esa es una pieza clave del Plan 2030.

Otro punto importante es extender las fronteras del vino, y del turismo relacionado al vino. Aunque cuando uno piensa en la bebida nacional inmediatamente imagina los paisajes cerca de la Cordillera, hoy hay 18 provincias con producción vitivinícola, y 14 con foco en el turismo. Buenos Aires y Entre Ríos son algunas de las que se sumaron.

Ley de tolerancia cero de alcohol al conducir

Un tema áspero para el sector es el avance de la ley de tolerancia cero de alcohol al conducir. Se trata de una medida que ya rige en más de una decena de provincias y que está a punto de tener sanción definitiva a nivel nacional en la Cámara de senadores. COVIAR se opone al igual que varias provincias productoras. González calificó de “demagógica” la inminente normativa.

“Tenemos una preocupación sobre el concepto. Estamos en contra del que tome luego maneje, pero la tolerancia que rige tiene fundamentos científicos. “Obviamente queremos que bajen los accidentes de tránsito, pero no creemos que esta ley lo haga, primero porque tolerancia cero no existe, porque los aparatos pueden tener fallas de precisión y segundo porque algunos derivados pueden hacer que no dé cero. Y estadísticamente los accidentes no se dan en entre 0 y 0,5, sino a partir del 0,8 o 1%”, sostuvo.

El ejecutivo afirmó que más allá de lo que apruebe el Congreso trabajarán para que la reglamentación sea “más acorde”, e insiste con que “son más efectivos los controles que la prohibición”. “Lo que se discute ahora es para tomar una medida, pero no corrige nada”, sentenció.

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