La Justicia falló que la pobreza y falta de trabajo no son justificativos para robar

La Cámara de Casación bonaerense confirmó las condenas a tres acusados de robar una vaca para comerla, quienes argumentaron que lo hicieron por el estado de pobreza y necesidad que padecieron durante la crisis de fines de 2002.

"Ni la miseria, ni la dificultad de ganarse el sustento propio necesario y el de los suyos son presupuesto de la eximente del estado de necesidad", sostuvieron los camaristas de la Sala I del Tribunal.

No obstante, de los tres condenados, sólo uno obtuvo la prisión en suspenso, puesto que los otros dos sufrieron penas de 3 años y medio y 3 años y dos meses respectivamente, por lo que deberán cumplir detención efectiva.

El hecho tuvo lugar a fines de 2002, y en "el momento -según el fallo- en que estos hechos se produjeran son tiempos en que el País se vio envuelto en una de las más serias crisis que más golpearon a los estratos sociales más desprotegidos".

Según el expediente, el 12 de setiembre de 2005 el Tribunal Oral Criminal Nº 1 (TOC1) de Dolores condenó a los tres acusados como "co-autores penalmente responsables de delito de robo de ganado mayor".

Durante el juicio, varios testigos explicaron que "los imputados eran personas honestas que buscaban trabajo sin éxito y a su vez que eran responsables de familias numerosas y que lo sustraído lo fue con el propósito de consumirlo y no venderlo".

Al emitir su voto, el juez Benjamín Sal Largués recordó que "todos los imputados eran personas de bien que vivían propiamente de la caza y que -circunstancialmente- acudieron al cuatrereo para subvenir a las necesidades de los suyos".

Sin embargo, los otros dos integrantes de la Sala I, los camaristas Horacio Biombo y Carlos Natiello, advirtieron que "un estado de pobreza genérica no conforma la causa de justificación por la necesidad".

"Resultan necesario que se trate de una situación apremiante cuya superación no admite demora", añadieron los jueces, al avalar las condenas dictadas durante el juicio oral y público.