En Argentina, el mate es una de las infusiones que más se toman durante el día durante el trabajo, el estudio o en una reunión. Sin embargo, se suele pasar por alto que las bombillas se ensucian por dentro a tal punto de tapar el conducto y nos impide seguir tomando el mate. Por lo que es importante su limpieza.
Mate perfecto: el secreto para tener una bombilla siempre limpia y lista para usar
La suciedad en estos objetos puede ser motivo de que se tape el mate regularmente y hasta puede transmitir microorganismos.
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La suciedad en la bombilla puede generar bacterias y hongos
Limpiar la bombilla es esencial para eliminar la suciedad que se acumula con el uso y el paso del tiempo. Esta práctica ofrece diversos beneficios, especialmente en términos de salud, ya que la higienización de este utensilio previene la formación de bacterias, hongos y otros microorganismos.
Además, la limpieza contribuye a mantener la calidad del mate. Cuando una bombilla está sucia, los residuos pueden mezclarse con el líquido y afectar negativamente el sabor de la infusión.
Cómo limpiar la bombilla del mate
Una de las formas más sencillas de limpiar una bombilla es utilizando cepillos diseñados específicamente para esta tarea. Aunque son fáciles de comprar y generalmente económicos, tienen la desventaja de no ser completamente eficaces. Para una limpieza más profunda, se recomienda utilizar agua hirviendo y bicarbonato de sodio:
- Llenar una olla con abundante agua, al menos hasta la mitad, y llevar a ebullición.
- Cuando el agua esté hirviendo, agregar una cucharadita de bicarbonato de sodio por cada bombilla que desees limpiar. Puedes aprovechar para limpiar varias bombillas a la vez.
- Introducir la bombilla en el agua y deja reposar durante unos 10 minutos.
- Después del tiempo indicado, retirar la bombilla y enjuágala bajo el agua del grifo para que se enfríe.
- El color que adopta el agua en la olla al final del proceso es un indicador claro de la suciedad que contenía la bombilla.
- Además de la limpieza, la prevención es clave para cuidar las bombillas. Seleccionar bombillas adecuadas, por lo que hay que evitar las muy finas, curvas y con agujeros pequeños.
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