Ya son muchos los inconvenientes que cosecha Mario Ishii, el intendente de José C. Paz, por incumplir con algunos compromisos pecuniarios. El que se conoció más recientemente es casi gracioso. Enfrenta a este alcalde del conurbano con la Iglesia Evangélica Luterana Unida (IELU). El conflicto se debe a una razón inusual: el pago del alquiler del edificio de la intendencia.
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El municipio de José C. Paz había celebrado un contrato de locación con la IELU entre el 10 de diciembre de 1999 y el 10 de diciembre de 2003.
Correspondía pagar $ 15.000 por el edificio central de la comuna, $ 650 por otros dos locales cercanos a esa sede y $ 500 por uno más pequeño y alejado. Estos precios se mantuvieron a lo largo de dos prórrogasdel contrato: una rigióhasta junio de 2005 y otra hasta diciembre de ese año. Los problemas comenzaron en esta oportunidad, es decir, hace 12 meses.
Reclamo
A partir de ese momento, el representante legal de los evangelistas luteranos no se cansó de enviar cartasdocumento para reclamar el pago de los alquileres.
También para pedir resarcimientos porque Ishii ordenó remodelar el edificio central, uno de los más antiguos de la zona. Sin considerar estos últimos reclamos, la intendencia estaría debiendo por alquileres unos $ 350.000 (es la suma aproximada que suele deber Ishii cada vez que cae en este tipo de inconvenientes). La IELU decidió la semana pasada iniciar un juicio por desalojo, cuestión que ha comenzado a preocupar al gobierno provincial (el caso lo sigue Florencio Randazzo, el ministro de gobierno) y también al de la Nación: después de todo, el «voto evangélico» siempre fue tratado con consideración, sobre todo en año de elecciones.
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