Agresivo, Trump salió a refutar las acusaciones de negligencia en la pandemia

Se desató una crisis por la admisión de su asesor y galardonado infectólogo, Anthony Fauci, de que la demora oficial en reaccionar costó vidas. EE.UU. es el país más castigado del mundo.

Anthony Fauci, un infectólgo de prestigio mundial, se mostró alentado por los ensayos con remdesivir para pacientes con Covid-19.

Washington - Un día después de que su administración quedara en el centro de las críticas por su falta de reacción inicial ante la pandemia de COVID-19, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, brindó ayer una inesperada y agria conferencia de prensa, en la que defendió su actuación, se enfrentó con los periodistas, aseguró que fueron estos quienes minimizaron el peligro y desafió a los gobernadores al señalar que él tiene la autoridad para decidir si el país sigue en cuarentena o si normaliza su actividad económica.

El republicano había quedado en el ojo de la tormenta el domingo, cuando el doctor Anthony Fauci, su asesor y máximo experto del país en enfermedades infecciosas, admitiera que podrían haberse salvado vidas si el Gobierno federal hubiera adoptado medidas tempranas de confinamiento por el brote del coonavirus.

Los dichos del médico, asesor de varios presidentes antes del actual, infectólogo de enorme prestigio internacional y considerado uno de los padres de la lucha contra el sida, provocaron una tormenta en el país al darles un argumento poderoso a los críticos de la conducta inicial desaprensiva del mandatario hacia el COVID-19.

EE.UU. es el país más golpeado por la pandemia, con más de 22.000 muertes -unas 10.000 solo en el estado de Nueva York- y casi 560.000 casos registrados.

Trump disparó las especulaciones al retuitear un mensaje de la excandidata republicana a la Cámara de Representantes, Deanna Lorraine, que citó los comentarios de Fauci durante la entrevista televisiva que concedió a CNN y escribió “es hora de #DespedirAFauci”.

Horas más tarde, el médico reconoció que había elegido mal las palabras y el presidente negó las versiones de despido.

Fauci, de 79 años, ha estado desde 1984 al frente de la agencia federal de enfermedades infecciosas, bajo presidentes republicanos y demócratas. George W. Bush le concedió la Medalla de la Libertad en 2008.

Más tarde, el mandatario llamó a una inesperada conferencia de prensa que duró casi una hora y media y, por momento, pareció una guerra con los periodistas que le preguntaban.

En esa línea, defendió el accionar de su Gobierno y negó que haya desestimado el peligro de la pandemia. Dijo que fueron los medios los que la ignoraron mientras esta ya causaba estragos en China en enero y febrero y hasta divulgó un video al respecto inmediatamente calificado de falso por varios medios importantes como CNN.

“Estamos cerca de completar el plan para reabrir el país”, dijo luego, al insistir en su idea de que las cuarentenas decididas por los estados deben terminar pronto.

Al respecto, reaccionó a la decisión de los jefes estaduales de agruparse por regiones para definir cuando se reabrirá la actividad y afirmó que “tengo toda la autoridad para tomar esa decisión”.