A un mes exacto del Congreso que la reunificó, un actor exógeno puso al descubierto las diferencias que persisten en la interna de la CGT: la organización del acto por el Día de la Democracia convocó sólo al sector de Hugo Moyano y dejó al margen a los “gordos” de los gremios de servicios, los “independientes” siempre cercanos a los oficialismos y el resto de los grupos más tradicionales de la central obrera. Esa distinción, sumada a la preeminencia que La Cámpora y los espacios más cercanos a Cristina de Kirchner tendrán en la convocatoria, hace prever una participación modesta de la organización en la marcha.
Recién unificada, la CGT ya muestra diferencias por la marcha de mañana
Los organizadores del acto sólo invitaron a Pablo Moyano a un encuentro de coordinación y dejaron al margen a Daer y a Acuña.
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A última hora de anoche eran pocos los dirigentes de la cima de la CGT con ánimo para referirse a la congregación a la Plaza de Mayo. De hecho, en los espacios que hasta hace un mes manejaban la central destacaron la indiferencia de los organizadores hacia la mayoría de los jefes sindicales. Esa actitud parece un reflejo de las idas y vueltas entre los “gordos” y La Cámpora, entre quienes fueron inútiles hasta ahora los intentos de acercamiento.
El martes hubo en la sede del PJ una reunión de los principales convocantes: allí acudieron el jefe de Gabinete, Juan Manzur, y el canciller, Santiago Cafiero; Anabel Fernández Sagasti y Mariano Recalde, por la agrupación kirchnerista, y Fernando “Chino” Navarro, del Movimiento Evita, en representación de los movimientos sociales afines al Ejecutivo. La pata gremial quedó acotada a Pablo Moyano, nuevo integrante del triunvirato de conducción de la CGT, y a su aliado Mario “Paco” Manrique, segundo del sindicato de mecánicos Smata.
En la jerga gremial, el llamado a uno sólo de los miembros del trío de jefes es decodificado como un desaire hacia los otros dos: Héctor Daer, referente de los “gordos”, y Carlos Acuña, hombre del gastronómico Luis Barrionuevo. Esa tensión subyacente contrasta con el espíritu unionista que imperó en la CGT durante la convocatoria por el Día de la Militancia, también en la Plaza de Mayo, el 17 de noviembre pasado, apenas unos días después del Congreso de reunificación de la central y de las elecciones legislativas. La convocatoria por parte de los sindicalistas se prevé, en esa línea, módica.
En la reunión los organizadores acordaron que el kirchnerismo entrará a la Plaza de Mayo por Diagonal Norte; la CGT, por Diagonal Sur, y los movimientos sociales por Avenida de Mayo. Alrededor de las 18.30 se prevé que arrancarán las alocuciones, probablemente con el arranque del expresidente de Brasil Luiz Inacio “Lula” Da Silva, la continuidad de la Vicepresidenta y el cierre, de Alberto Fernández.
Por parte de la central obrera para hoy está conversada la posibilidad de una reunión de la nueva “mesa chica” de conducción. Esa instancia, que históricamente reunió a Daer con los “independientes” Gerardo Martínez, Andrés Rodríguez y José Luis Lingeri, debutará en caso de concretarse con la participación de Pablo Moyano y, eventualmente, “Paco” Manrique. Entre los dirigentes comentaban anoche que para hoy también está ideado un comunicado de llamado a participar de la marcha y con una reivindicación de la democracia.
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