6 de septiembre 2007 - 00:00
Serán autorizadas sólo las listas que sumen a Cristina
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En muy pocos distritos del conurbano bonaerense está comprometida la continuidad del intendente; por tal motivo, es preocupación y objetivo político de la cúpula del gobierno nacional fortalecer el apoyo a la candidatura de la primera dama y evitar a cualquier costo una posible segunda vuelta electoral. La lista que no aporte al proyecto nacional no será respaldada y se buscarán las alternativas políticas para lograr el mejor resultado posible.
Los jefes comunales saben que en esta elección la tracción de votos se dará de abajo hacia arriba y fundamentalmente en distritos clave del conurbano, como La Matanza, Lanús, Lomas de Zamora, Almirante Brown, José C. Paz, Malvinas Argentinas, San Martín, ahora con la nueva concertación con Ricardo Ivoskus, y en la Región Metropolitana Norte.
En cuanto a la consolidación de los jefes comunales, se detallan algunos casos que marcan claramente la supremacía sobre los potenciales adversarios. En Avellaneda, donde aparecieron varios candidatos denominados K, el actual intendente Baldomero Alvarez de Olivera manifiesta una intención de voto de 46,3% sobre Laborde, con 8,5%, y el candidato de Macri con 6,3%. El martes próximo en el Teatro Roma, «Cacho» Alvarez presentará su propuesta de gobierno para los próximos cuatro años.
En Almirante Brown se le ha otorgado la lista oficial a Jorge Villaverde, el diputado nacional que inició un programa de gobierno hace más de dos décadas y ahora retorna luego de dos administraciones coherentes con el proyecto iniciado oportunamente. Giustozzi y el ex árbitro Javier Castrilli, buscarán seguramente a través de partidos vecinalistas llegar con sus propuestas a los vecinos de este distrito del sur del conurbano.
En Lanús, Manuel Quindimil, que fue bendecido por el propio presidente de la Nación y posteriormente por el PJ en el congreso realizado en este lugar, se plantó ayer y presentó su renuncia a la candidatura (ver nota aparte).
Esquemas
Dos casos en particular rompen los esquemas elaborados en la última reunión de intendentes justicialistas. Lomas de Zamora presenta tres listas bien definidas, con mucha participación mediática y que pueden aportar votos a la candidata a presidenta. El intendente Jorge Rossi y el diputado provincial Osvaldo Mércuri son los candidatos mejor posicionados. De un lado o de otro confían en el triunfo y hasta tienen sondeos que certifican tal afirmación. Y como tercera fuerza el diputado Navarro no llegaría al 10% impuesto para autorizar su lista, pero el respaldo político que tiene lo eximiría de esa exclusión.
En La Plata se vive un panorama muy parecido. El intendente Julio Alak intenta ser reelegido, tiene la bendición oficial por su carácter de alcalde, pero deberá enfrentar a Pablo Bruera, que también contará con los candidatos oficiales en su boleta y ha confirmado alianzas con diversas instituciones políticas locales. Castagneto es la tercera candidatura en cuestión, y todo se definirá este sábado en el marco de un ambiente muy cargado de nervios e incertidumbre. El funcionario de la cartera de Desarrollo Social de la Nación descartó, además, cualquier eventual alianza con el resto de los candidatos, o al menos con quienes figuran entre los principales lugares en las encuestas.
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