Federer venció a Nadal en su tierra y se coronó en el Masters de Madrid
-
A 12 años: ¿cuál fue la mejor carrera del siglo de Fórmula 1?
-
La rompió en la liga de Estados Unidos, llegó a su selección y dejó todo para ser activista LGBT
Nadal perdió la oportunidad de enhebrar los títulos de Montecarlo, Roma y Madrid (antes Hamburgo), los tres grandes torneos de arcilla que preceden a Roland Garros, algo que nadie logró desde la creación del ATP Tour en 1990.
El balance de enfrentamientos personales entre ambos sigue favoreciendo ampliamente a Nadal por 13 victorias contra siete derrotas.
Pese a que Nadal no jugó en su mejor nivel -las cuatro horas que necesitó para la épica victoria del sábado ante el serbio Novak Djokovic le pasaron factura-, el éxito del suizo fue claro y merecido: Federer mostró a lo largo de la semana un tenis sólido y efectivo, y hoy dominó el encuentro.
"Esta es la final con la que soñé durante ocho años", confesó antes del encuentro Manolo Santana, director del torneo. El primer encuentro oficial entre Nadal y Federer en suelo español no cumplió con todas las expectativas, ya que el número uno no estuvo en su mejor nivel.
Pese a ello, Nadal, de 22 años, evitó poner excusas cuando se le preguntó si había pagado hoy esas cuatro horas.
"Lo que he pagado es principalmente que él fue mejor que yo. No favorece haber jugado cuatro horas ayer, pero con su juego de hoy no sé si hubiera podido pararle igualmente".
Federer mostró un muy buen servicio y solidez desde el fondo, y apeló con inteligencia y sentido de la oportunidad al lanzamiento de drop-shots para explotar la pesadez de piernas de Nadal.
Entusiasmado, apretó el puño derecho al quebrar el servicio de Nadal para adelantarse 5-4. Instantes después, con un saque ganador en su subida a la red, se llevó el set por 6-4 en 40 minutos.
Un notable drop de revés, primero, y un revés con slice largo y sin peso, luego, le permitieron a Federer quebrar el servicio de Nadal para adelantarse 3-2. Más tarde se recuperaría de un 15-40 sacando 5-4 y se llevaría la final.
Así, el suizo revitaliza sus esperanzas de conquistar dentro de tres semanas el título de Roland Garros, el único Grand Slam que se le resiste, y en el que Nadal cortó sus sueños en las finales de los últimos tres años.
Además de 585.000 euros (unos 790.000 dólares), un coche Lexus flamante y 1.000 valiosos puntos para el ranking mundial, Federer se llevó la tranquilidad de ganar, por fin, un título en una temporada en la que sólo llevaba jugada una final, la de su lacrimógena derrota con Nadal en Australia.
Dejá tu comentario