Cumbre hoy del Fondo con Prat-Gay y Lavagna
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Microimpresión e impresión en relieve: los detalles que debés tener en cuenta del billete de 100 dólares
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La medida que pretendía frenar la crisis económica y afectó a los ahorristas argentinos
El FMI envió el martes a Nueva York, a la reunión que mantuvo el comité global de acreedores, a un funcionario de la línea técnica para que presencie el encuentro. Allí también participó un enviado del Ministerio de Economía, Federico Molina, actualmente al frente de la oficina financiera del Palacio de Hacienda en Washington. La falta de respuestas por parte de Molina, que sólo atinó a recomendar a los acreedores que se anoten en el registro de bonistas, causó irritación entre los inversores.
Recién sobre fines de la semana que viene podrían llegar las señales esperadas desde Washington que destraben el acuerdo. «No hace falta que lo apruebe el directorio. Simplemente, vamos a esperar una comunicación de Köhler, tal como sucedió en la primera revisión», señalaron en Economía.
Los otros temas involucrados para esta etapa pasaron a un segundo plano. Desde el punto de vista del sistema financiero, el Fondo aprobó rápidamente las líneas en las que está avanzando el Banco Central. Se modificó, en este sentido, la postura inicial que tenía el organismo el año pasado, que insistía con la necesidad de cerrar los bancos débiles. Por el contrario, se impuso la postura de adecuación gradual a las normas de capital que encaró Prat-Gay.
• Tarifas
En cuanto al plano fiscal también hubo una rápida revisión favorable. De hecho, la reunión del secretario de Hacienda, Carlos Mosse, con los técnicos del FMI apenas se prolongó por 45 minutos.
La otra cuestión que fue recibida favorablemente por el organismo pasa por el aumento de tarifas (sólo para el segmento mayorista) que se aprobó para la luz y el gas. Justamente, uno de los compromisos asumidos por Lavagna al aprobarse la primera revisión pasó por rever la situación tarifaria de las empresas de servicios públicos.
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