Buena unión, más allá del leitmotiv

«Immigrasons». Con Raúl Fernández, Ernesto Snajer y grupo. Acqua Records.

El proyecto Immigrasons nació de la colaboración del Ministerio de Cultura porteño y el Mercat de Música Viva de Vic, en Catalunya. Cada entidad eligió un director musical: Raúl Fernández «Refree» por Barcelona y Ernesto Snajer por Buenos Aires. A su vez, cada uno de estos músicos seleccionó a sus coterráneos para dar forma definitiva al grupo. Además, se hicieron entrevistas en ambos países a personas que debieron emigrar por distintos motivos (el eje central del trabajo es la inmigración).

Todo ese muy interesante planteo, sin embargo, queda poco expuesto para quienes sólo se limitan a escuchar su disco. Salvo por la inclusión compartida de clásicos argentinos de distintos géneros y de canciones catalanas, la inmigración no es tema del álbum. Y las mezclas de estilos son producto más de las experiencias personales de dos directores musicales jóvenes y urbanos, que de la elaboración a partir de las raíces. Pero claro, se trata de un disco y, entonces, lo que verdaderamente importa es el resultado estético. Y allí, Immigrasons tiene muchísimo a favor. El listado de canciones es estupendo: «Laura va» de Spinetta, «Menuda» de Serrat-, «Vidala del último día» del Chivo Valladares, « Carabelas nada» de Fito Páez (en una versión excelente), el tango «Loca» (convertido en una danza balcánica), «La nochera» de Dávalos y Cabeza, «L'emigrant» de Verdaguer y Vives, «Doña Ubenza» del Chacho Echenique, etc.. Además, el grupo suena moderno, experimental en sus arreglos, de fusión en la combinación de géneros. Y, sobre todo, tiene la bellísima voz de la española Silvia Pérez Cruz.

Ricardo Salton