24 de abril 2024 - 14:24

Vera Spinetta encabeza film vanguardista en el Bafici

Diálogo con la hija del "Flaco" Spinetta, que coprotagoniza con Sofía Gala la película "Bajo naranja", opera prima del estadounidense Michael Taylor-Jackson.

Vera Spinetta, una de las protagonistas de Bajo naranja que se está exhibiendo en el Bafici.

Vera Spinetta, una de las protagonistas de "Bajo naranja" que se está exhibiendo en el Bafici.

Un joven estadounidense se inclina ante la tumba de Hipolito Bouchard, el corsario francés al servicio de la Argentina que en 1818 venció a los españoles de Monterrey, ocupando el pueblo durante seis días. El muchacho le rinde homenaje depositando tierra de aquel pueblo, coronada por una bandera de la República de California, una organización surgida en 1846, que duró apenas 25 días. Poco después, se vincula con una comuna de artistas que escenifica un juicio a Kissinger y, entre otras cosas, practica el poliamor. Así empieza la película “Bajo naranja”, que compite en la sección Vanguardia y Género, del Bafici. Coproducción que se anuncia como “película de género fluido”, viene con un manifiesto, del que transcribimos algunos párrafos:

“Nuestra sociedad legaliza sus perversiones y castiga lo que nos cura”. “Bajo Naranja apunta a la contradicción de un mundo cada vez más engañoso donde el internet es real y las noticias son falsas”. “Ya hace tiempo que estamos cansadxs de tolerar los efectos de la heteronorma”. “Por lo tanto, debemos abogar no solo por la separación de la Iglesia del Estado, sino, lo que es más importante, por la separación de la verdad del sistema de binarios”.

Buscando claridad dialogamos con una de las protagonistas, Vera Spinetta:

Periodista: ¿Leyó usted ese manifiesto?

Vera Spinetta: Todavía no. Para mí, lo más interesante de esta obra es la mirada naif de un personaje estadounidense sobre la cultura argentina, que encima cae con esos locos. De a poco la historia también enloquece, se hace cada vez más bizarra. Es una película especial, distinta, veremos qué público la recibe.

P.: En parte parece improvisada.

V.S.: Ensayamos mucho, jugamos, propusimos cosas, varias escenas surgieron de ese modo. Y a veces el director, Michael Taylor-Jackson, decía “aquí vamos a poner un plano a lo Godard, porque nos divierte, porque lo amamos”. Michael es bastante particular, terminante y a la vez muy dulce, un pibe bueno. Esta es su opera prima, mucha responsabilidad.

P.: ¿Cómo lo conoció?

V.S.: Por el casting, que tuvo sus particularidades. Como es una historia coral, los intérpretes debíamos entendernos, algo que se fue dando naturalmente. Entré, al otro día entró Sofía Gala, que somos amigas; Gianluca Zonzini, después Bel Gatti, y así. Michael buscaba alguien que hiciera de estadounidense, y lo convencimos para que actuara él. Estuvo muy bien.

P.: Usted compone un personaje de carácter fuerte, que quiere imponer su opinión por encima de la supuesta igualdad que debe reinar en una comuna.

V.S.: Trato de no juzgar a mis personajes, porque de otro modo no podría encarnarlos, pero soy más tranquila.

P.: Vayamos a una comuna más seria, la del drama ítalo-argentino “Soledad”, de Agustina Macri.

V.S.: Importantísimo para mí, un desafío enorme, porque conocía la historia de Soledad Rojas, que hoy es un símbolo de los anarquistas italianos, además era mi primer protagónico, y una película de personajes con un arco dramático muy grande. Fue un proceso larguísimo, de casi tres años, aprendí italiano, con Agustina nos entendimos muy bien, me dejó probar cosas fuera del guión, lo que permitió una interpretación profunda, vívida. Lloraba de emoción, por estar haciendo algo que me motivaba, por tener la posibilidad de salir a jugar fuerte. Porque nuestra profesión es eso, saltar al abismo.

P.: Buena película, una pena que le hayan hecho el vacío a la directora por portación de apellido.

V.S.: Fue un momento controversial, las cosas estaban caldeadas. Pero ella es bárbara, muy talentosa y apasionada.

P.: Desde Marcelo Piñeyro con “Las viudas de los jueves”, usted ha tenido directores valiosos como Lerman, Piroyanski, Giralt. Y también otros, no tan valiosos.

V.S.: Yo era la más chica de esa película. Marcelo, que tiene mucha paciencia, me enseñó todo lo que es el juego del actor con la cámara, lo que sucede entre el actor y la cámara cuando se filma. Fue hermoso reencontrarnos, 13 años después, en la miniserie “El reino”. Yo, de todos me he sentido cuidada, y de todos he aprendido, incluso de los “no tan valiosos”, porque de todas las personas se puede aprender algo. Además nunca tuve que sufrir a nadie hostil en este medio.

P.: No hablamos de las muchas series y miniseries en que ha trabajado.

V.S.: También tengo buenos recuerdos, en especial de “Presentes”, una serie muy linda, que sacaba a la luz temas importantes, como la discriminación. Recuerdo que en la segunda temporada estaba amamantando a Eloísa, mi primera hija.

P.: ¿Cuántos hijos tiene?

V.S.: Dos. Eloísa, de 9 años, y Azul, que es un varón, de 3 y medio.

P.: Qué nombre singular para un varón (como antes era René).

V.S.: Me inspiré en el hijo de Miguel Abuelo, que era muy amigo de mi padre, ambos se admiraban mutuamente. El bautizó a su hijo como Gato Azul. Y lo ves, y es azul. No es un nombre habitual, pero ahora hay varios Azules, ¡a partir de mi Azul!

Dejá tu comentario

Te puede interesar