Acné en adultos: ¿por qué persiste aunque no seamos adolescentes?

Hay muchos factores por los que el acné puede aparecer luego de la adolescencia. Conocé cuáles son y qué hacer para evitarlo.

Desmitificando que el acné es solo cosa de jóvenes. 

Siempre asociamos el acné con la adolescencia, pero para muchos adultos, este problema cutáneo persiste, generando preguntas y preocupaciones sobre cuándo se acabará.

Según los propios dermatólogos, es común sufrir rebrotes de acné con más de 40 años, e incluso padecer de acné aunque no lo hayan sufrido en la adolescencia.

Por qué podemos tener acné siendo adultos

Factores hormonales

Aunque los desequilibrios hormonales son típicos en la adolescencia, pueden persistir en la edad adulta, especialmente en mujeres durante el ciclo menstrual, embarazo o menopausia. Los cambios hormonales desencadenan la producción excesiva de sebo, obstruyendo los poros y favoreciendo la aparición de granos.

Factores genéticos

La predisposición genética desempeña un papel crucial. Si hay antecedentes familiares de acné persistente, las posibilidades de experimentarlo en la edad adulta aumentan.

Estrés y mala alimentación

El estrés, la falta de sueño, la mala alimentación y fumar pueden influir en la aparición del acné. Estos factores pueden desencadenar respuestas inflamatorias en la piel, generando problemas cutáneos.

El estrés potencia la generación de acné.

Falta de cuidado y productos dañinos

El uso de productos cosméticos o el incumplimiento de una rutina de limpieza facial adecuada pueden contribuir al desarrollo del acné en adultos. La obstrucción de los poros por maquillajes o productos faciales inapropiados puede desencadenar brotes.

Consejos para evitar el acné en los adultos

• Rutina de cuidado: Establecer una rutina de cuidado de la piel con productos adaptados al tipo de piel. La limpieza facial regular ayuda a prevenir la acumulación de sebo y bacterias. Un dermatólogo puede ofrecer opciones de tratamiento personalizadas.

El cuidado de la piel y la alimentación saludable son de vital importancia.

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• Dieta equilibrada: Adoptar una dieta rica en frutas, verduras, granos enteros y proteínas magras puede mejorar la salud de la piel. Evitar alimentos procesados, fritos y ricos en azúcares puede reducir la inflamación cutánea.

• Manejo del estrés: Incorporar técnicas de manejo del estrés, como la meditación o el yoga, puede ayudar a equilibrar las hormonas y reducir la aparición de acné relacionado con el estrés.