Un rápido incendio obligó a 700 residentes del sur de California a salir de sus viviendas, un día en el que se registraban fuertes vientos tras meses de sequía.
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Los bomberos indicaron que dos viviendas fueron destruidas y se quemaron 1.000 acres, mientras el fuego amenazaba el vecindario de Anaheim Hills en el condado de Orange, cerca de 35 millas (56 kilómetros) al sudeste de Los Angeles.
"Es un fuego muy peligroso. El terreno está bastante áspero (...) El fuego gana velocidad mientras avanza en las colinas y en los cañones", dijo el jefe de batallón del condado de Orange, Ed Fleming .
California estuvo bajo alerta el fin de semana ya que los vientos cálidos elevaron las temperaturas, después de uno de los inviernos más secos de los que se tengan registro.
La temporada de mayor riesgo de incendios es entre junio y octubre, pero los funcionarios han advertidos a los habitantes del sur de California que estén en alerta constante.
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