Fabricante de Botox pagará u$s 600 millones por mal uso de sus productos

El botox paraliza los músculos y evita su contracción

Allergan, el fabricante estadounidense del Botox, dijo que acepta pagar 600 millones de dólares para saldar procedimientos en EEUU, donde la justicia lo acusó de promover el uso de su célebre tratamiento antiarrugas para otros casos que no estaban autorizados.

Las acusaciones, que corresponden al periodo 2000-2005, señalan que la promoción del producto originó su empleo para el tratamiento de cefaleas, dolor, espasmos y parálisis cerebral de menores. Allergan fue encontrado culpable y debe pagar 375 millones de dólares al gobierno y otros 225 millones para saldar demandas civiles.

"Se trata del mejor acuerdo para nuestros accionistas ya que resuelve todas las cuestiones de la investigación, evita mayores costos derivados de los litigios, así como los riesgos sustanciales de Allergan asociados a la acción del gobierno en estas materias, y permite que concentremos nuestro tiempo y recursos en forma productiva para el desarrollo de nuevos tratamientos para los pacientes y la comunidad médica", dijo Douglas Ingram, vicepresidente ejecutivo de la empresa.

Botox contiene la letal toxina del botulismo. Cuando se inyecta en pequeñas dosis, la sustancia paraliza el músculo y evita su contracción, lo que elimina las arrugas faciales. También se utiliza para otros usos terapéuticos. Hace 20 años fue aprobado por primera vez en los EEUU para el tratamiento de los trastornos del músculo ocular.