Heredó un imperio millonario de supermercados pero prefirió concentrarse en la filantropía: quién es Alice Walton

Después de trabajar por décadas en el mundo de las finanzas, la empresaria decidió dedicarse de lleno al desarrollo de la salud y la educación.

Alice Walton se centró mayormente en integrar el arte, la ciencia y las humanidades con sus fnanciamientos.

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Alice Walton es una de las mujeres más ricas de todo el mundo, gracias a la herencia que le dejó su padre: la cadena de supermercados Walmart. Sin embargo, a diferencia de sus hermanos, ella no participa activamente de su gestión, sino que decidió dedicarse a la filantropía.

A diferencia de otros multimillonarios que enfocan sus donativos a investigaciones y causas relacionadas con la tecnología, Walton se centró en el acceso al arte. Con sus contribuciones monetarias, intentó integrar arte, naturaleza y bienestar en sus proyectos.

Quién es Alice Walton, una de las mujeres más ricas del mundo

Gentileza - La Orla

Nacida en 1949, Alice Walton es hija de Sam Walton, el fundador de Walmart. Ella recibió una licenciatura en economía en la Universidad de Trinity, en San Antonio, y se dedicó mayormente a las finanzas. Trabajó como analista de acciones para First Commerce Connection y dirigió actividades de inversión en la firma EF Hutton.

En 1988, Walton fundó Llama Company, un banco de inversión donde trabajó como CEO, directora ejecutiva y presidenta. Gracias a su trabajo y a la herencia de su padre, hoy en día Alice Walton cuenta con un patrimonio estimado de más de 111 mil millones de dólares, según la revista Forbes.

Obra filantrópica de Alice Walton

Alice Walton actualmente se dedica a su fundación y a su museo de arte.

Gran parte de la riqueza de Alice Walton fue direccionada a fomentar la cultura, la educación, la salud y el desarrollo comunitario. Por ejemplo, este año abrió sus puertas el Alice L. Walton School of Medicine, en la que no solo se enseña medicina, sino que también integra artes y humanidades.

Otro proyecto destacado de Walton fue la creación de la Fundación Art Bridges. Gracias a esta, busca llevar el arte estadounidense a museos más pequeños o de bajos recursos con el objetivo de atraer más público y poder exponer las piezas. Además, con su fundación propia, la Alice L. Walton Foundation, la multimillonaria ofreció fondos a distintas causas benéficas para mejorar oportunidades de vida.